Me manifiesto en contra del gobierno. Me manifiesto en contra del PAN, por todos aquellos que fueron engañados y creyeron en su propuesta de un gobierno mejor. También por los que como yo, padecemos las consecuencias.
Me manifiesto en contra de que nos gobiernen “personas” como Emilio González, por mentarme la madre a mí, su opositora.
En desacuerdo con Jorge Salinas y Martínez Mora, porque dudo que la riqueza que poseen haya sido obtenida con el sudor de su frente, como lo declaran sus promocionales televisivos.
En contra del o los responsables de la llamada telefónica a mi casa, que enmascarada de encuesta, se dio a la tarea de revelarme los “oscuros” secretos de Aristóteles.
Me manifiesto en contra de la creciente mezcla entre la religión y la política, y de que utilicen a la primera como herramienta para influir sobre la gente.
Me manifiesto en contra de las obras públicas malhechas, entregadas a destiempo y con sobreprecio y por las múltiples deficiencias del macrobús.
Me manifiesto de esta manera, porque aún quiero creer que podemos sacar al país de la desdicha.
