La Secretaría de Cultura Jalisco (SCJ) obtuvo un presupuesto histórico en el 2008 de 475 millones de pesos aproximadamente, es decir, más de 200 millones de pesos más que en el 2007.
A pesar de la multiplicación de los recursos, el arte y la cultura no proliferaron. De acuerdo a Roberto Castelán Rueda, rector del Centro Universitario de los Lagos “prácticamente el trabajo de la SCJ no se vio. Sigue existiendo la desvinculación en lo que hace la secretaría y quienes hacen la cultura en Jalisco. Resultados concretos en el 2008 honestamente no los encuentro, no hay proyectos relevantes que se puedan impulsar para los próximos tres años”.
Castelán, quien es también doctor en historia, dijo que es necesario que los funcionarios se replanteen objetivos porque no todo debe centrarse en las vías verdes o paisajes tequileros. “El apoyo a conservar el patrimonio cultural en los municipios es un mito porque las iglesias se están deteriorando, además es trabajo del Instituto Nacional de Antropología e Historia.
”La anterior administración de la SC invirtió en el Teatro Degollado, pero la actual necesita invertirles a otros espacios, inclusive a la creación de infraestructura, porque no hay infraestructura cultura. La anterior administración hizo el mito famoso de que se han abierto casas de la cultura en los municipios y que habían apoyado al patrimonio cultural de las regiones, no obstante, eso no ha sucedido. Quien ha hecho el trabajo es Cultura UdeG”.
Requiere generar una mayor confianza frente a la comunidad artística de Jalisco, y realizar proyectos a largo alcance, no han pensado que puede hacer el arte frente a la violencia o la crisis económica.
Para Martín Almádez, director del Consejo Estatal para la Cultura y las Artes Jalisco (CECA) fue muy positivo que haya aumentado el presupuesto, sin embargo, la mayor parte se ejerció en patrimonio cultural ubicado en zonas turísticas, ejemplo de ello es el paisaje agavero.
“La mayor parte de lo que se ha entendido como patrimonio cultural se reduce a edificaciones y construcciones y principalmente edificios religiosos, iglesias católicas; el dinero se debería de distribuir de forma más plural y al patrimonio intangible”.
Lo cuestionable es que el ejercicio presupuestal estuvo atrasado en ejercerse hasta el ultimo 31 de diciembre de 2008 fue entregado para que no se perdiera.
Otro punto negativo es el poco apoyo que ha proporcionado la SCJ al Instituto Cultural Cabañas, y que a pesar de ser un instituto descentralizado que puede hacerse sus propios recursos, la SC está obligada a proporcionarle recursos puesto que es patrimonio cultural de la humanidad y eso no lo han sabido valorar. “Lo tiene en el abandono absoluto, sin difusión, es un grave descuido porque es de imagen internacional y que habla de alguna forma de la importancia que tiene Guadalajara, Jalisco y México”.
Contrario a lo que comentó Castelán, Martín Almádez dijo que la secretaría ha hecho mucho trabajo en los municipios “hay una línea de la secretaria de dirección general de fomento y difusión que ha sido muy talachera, incisiva y trabajadora en los municipios donde llevan a cabo talleres de toda índole de disciplina artística: literatura, música, artes plásticas. La gente de los municipios está tomando al arte como necesidad.
También se está haciendo algo muy bueno en materia editorial. Se han publicado unos 30 títulos, que aunque son pocos, es un trabajo de colección editorial presumible, bien hecho y que esta diseñado bajo la dirección Avelino Sordo Vilches y Patricia Gutiérrez”.
Para Igor Lozada, director de Cultura UdeG, valorar a la secretaría de cultura es muy difícil ya que está en el ámbito subjetivo, “es muy complejo poder hacer una valoración de si es buena o mala”.
Indicó que Guadalajara vive una sobreexplotación demográfica que obliga a tener relaciones sociales distintas, y esto se refleja en la cultura. “En los últimos seis años se ha estado reestructurando la sociedad y apenas estamos en los albores de lo que será la nueva sociedad tapatía y la SCJ también está en el proceso de reacomodo”.
Los huecos de la SCJ no dependen de una sola persona, es toda la entraña de la institución, así como la reunión de equipos y voluntades. “Espero que la gente lo pueda comprender porque por decreto no suceden las cosas”.
Lozada comentó que aún no se subsanan el desencuentro que existe entre la comunidad artística y la SCJ, pero, habría que ver cuál es esta comunidad artística que está en desacuerdo y qué tipo de desencuentro existe, porque la comunidad artística es muy recelosa de la crítica y eso agrava el problema.
Para este 2009, la SCJ tendrá 453.5 millones de pesos; es decir, 21.1 millones menos que en 2008.
