Fotografía: Abraham Aréchiga

Dos contextos que se entrelazan están retratados en los libros Desprecios que matan: Desigualdad, racismo y violencia en Colombia, escrito por el antropólogo Eduardo Restrepo y Periodismo de frontera en América Latina. Violencias y desigualdades múltiples, de la historiadora Celia del Palacio Montiel.

Ambos volúmenes fueron publicados por la Editorial de la Universidad de Guadalajara (UdeG) y presentadas este miércoles en la Biblioteca Iberoamericana Octavio Paz, en un acto organizado por el Centro Maria Sibylla Merian de Estudios Latinoamericanos Avanzados en Humanidades y Ciencias Sociales (CALAS).

Sobre Periodismo de frontera en América Latina, su autora explicó que se trata de un ensayo que busca explicar el concepto que da nombre al libro y que tiene que ver con aquellos periodistas que trabajan en zonas donde están en la mira de criminales y actores que obstaculizan su trabajo.

“Desde el concepto de los márgenes del Estado buscamos entender estas zonas de frontera donde el Estado no llega, o sí llega, pero tienen que torcer las leyes para convivir con otros actores que no son estatales. Ahí el periodista tiene que actuar de otra manera, frente a esos peligros”, relató Del Palacio Montiel, quien es Coordinadora del Observatorio de Libertad de Expresión y Violencia contra Periodistas de la UdeG.

Fotografía: Abraham Aréchiga

“Aquí nos interesa –añadió–, qué hacen esos periodistas para sobrevivir y que no los maten”.

El jefe de la División de Estudios Políticos, del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH), Armando Zacarías, apuntó que Del Palacio Montiel realizó un trabajo que bien podría ser un diagnóstico de la democracia a partir de la presencia del periodismo y quienes se dedican a dicha profesión.

“El análisis nos muestra más la presencia de México que otros países de América Latina, pero en la comparación documental los elementos no discrepan mucho. Si el medio es difícil de interpretar, también es complejo interpretar al periodista. Ella nos muestra quiénes son los periodistas y qué representan en los microcosmos que constituyen a Latinoamérica”, dijo.

Gerardo Gutiérrez Cham, académico del Departamento de Estudios Literarios del CUCSH, dijo que el libro Periodismo de frontera en América Latina es necesario porque “coloca al centro al periodista local y nos muestra quiénes son esos periodistas que sufren extorsión, que pueden ser desaparecidos; cómo funcionan sus prácticas y por qué se han colocado en estas democracias periféricas”.

“El libro va más allá, puesto que nos ayuda a entender cómo funcionan nuestras democracias maltrechas, golpeadas, todo el tiempo en reconstrucción”, recalcó.

Fotografía: Abraham Aréchiga

En tanto el autor de Desprecios que matan: Desigualdad, racismo y violencia en Colombia, añadió que su obra se inspira en dar cuenta de uno de los problemas que aquejan a este país que es de los más desiguales de la región.

“El racismo es una dimensión de la desigualdad social. Este libro es muy particular porque está escrito en un tono para ser leído por mucha gente. Conversa con cosas relacionadas con la filosofía e historia política de Colombia, uniendo con otras líneas que son conversaciones en colectivo”, expresó Eduardo Restrepo.

El académico Nicolás Rey dijo que el libro habla de la labor de líderes afro, como Francia Márquez, quien viene de la lucha social en temas de derechos humanos, medio ambiente y feminismo, y quien logró ser Vicepresidenta de Colombia.

La investigadora afrocolombiana Marleys Meléndez Moré, estudiante del doctorado en Educación de la UdeG, dijo que es un libro que es muy necesario, que aunque cree que no debería existir, es una herencia del colonialismo.

“Este texto si bien está centrado en Colombia, el autor se centra en el Pacífico Sur colombiano y expone que el racismo estructural sobrepasa la discriminación racial, que es diferente al racismo estructural, y que bien podría incluir a todos los países latinoamericanos, porque esto que se ve en Colombia se ve en México y en otros países”, subrayó Meléndez Moré.

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