Una nueva ruta musical

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102501 Hey Yeah Yeah Yeahs, banda neoyorquina garage y punk rock, se presentÑ en el teatro diana. Karen O. Foto: Tonatiuh Figueroa.

ÉDGAR CORONA

El transcurso de la última década significó un cambio rotundo para la industria de la música en el ámbito mundial. Los sistemas de producción, distribución y consumo que en continuas ocasiones fueron modificados por las compañías trasnacionales –conforme a sus propios intereses y necesidades de mercado–, nunca se vieron con tanta afectación y desconcierto como en años recientes.
Estas transformaciones que involucran principalmente el uso de la tecnología, tienen como consecuencia una nueva percepción y hábito de consumo sobre los productos y servicios que la industria de la música genera. Aunque se habla de un estado de crisis, el panorama delinea una situación de ajuste, en la que empresarios, productores y músicos intentan resolver una serie de desafíos y establecer nuevas reglas.
En noviembre del año pasado, la Universidad de Guadalajara realizó la presentación oficial de la Feria Internacional de la Música (FIM), una plataforma que servirá como punto de encuentro para el diálogo entre profesionales de la industria y la interacción con el público. La intención es la búsqueda de alternativas de negocio y la promoción y difusión de la música en sus diferentes géneros.
Después de sufrir varias décadas de centralización, Guadalajara se encuentra más sólida dentro de la escena musical en México y se vislumbra como una plaza importante en Latinoamérica. De esta manera, del 16 hasta el 19 de junio, la Feria Internacional de la Música efectuará en diversas sedes, actividades que consideran paneles magistrales, encuentros profesionales, talleres, conciertos, showcases, exposiciones y una muestra fílmica. Los puntos neurálgicos de la feria son: Expo Guadalajara, Teatro Diana y Auditorio Telmex.
“Sabemos que con la creación de la Feria Internacional de la Música llenamos una necesidad dentro de este medio. Ocurrió una transformación y la industria responde, quizás tarde, debido a que la música no se vende, distribuye y escucha igual que hace unos años”, dice Ana Teresa Ramírez, directora de la FIM.

Industria y academia
El programa académico, integrado por los paneles magistrales y los encuentros para profesionales, representa uno de los ejes cardinales para la FIM. Los resultados que obtengan en estas mesas de diálogo serán decisivos para el futuro y éxito de esta feria, como una plataforma que busca la sinergia entre cultura y negocio.
Ana Teresa Ramírez dice: “Es necesaria una plataforma de estas características para que los involucrados en la industria de la música puedan abordar los temas fundamentales en este momento. Será importante el intercambio de ideas y poner en práctica los mejores acuerdos”.
Los paneles magistrales analizarán los temas: “Latinoamérica hoy: modelos de desarrollo cultural”, “La gestión cultural contemporánea”, “El nuevo perfil de los derechos de autor”, “Los músicos en el siglo XXI”, “Música e internet”, “Detrás de los grandes foros” y “Alternativas de negocio en el mundo de la música”. En este último participa Mauricio Abaroa, fundador y actual director de la empresa Earth Town Entertainment. Abaroa trabajó en Warner Music México e impulsó la carrera de grupos como Café Tacvba. Posteriormente, Sony Music lo contrató como presidente de Crescent Moon Records.
Respecto a su participación en la FIM, Mauricio Abaroa comenta: “Abordaré la diversificación en el modelo del negocio de la música. El esquema al que estábamos acostumbrados en el pasado ya no opera más. Estamos en un momento de alianzas en el que surgen posibilidades de negocio extraordinarias. Aún así, el factor determinante continúa siendo la creación de una buena obra. Significa un factor indispensable para la presentación de los proyectos musicales”.
Mauricio Abaroa habla de esas posibilidades: “Necesitamos unificar los criterios de esta industria. Siento que la importancia de la FIM radica en poder sentar las bases para obtener resultados benéficos que se podrán ver en el transcurso de unos años”.
Los encuentros para profesionales integran los temas: “Distribución digital”, “Promotores, mánagers, programadores y productores de espectáculos”, “Disqueras independientes” y “Festivales de música”. En este último estará presente Santiago Trujillo, director del Instituto Distrital de las Artes (Idartes), en Colombia. Trujillo tiene la responsabilidad de organizar distintos festivales, entre éstos Rock al Parque.
“Desde Bogotá queremos compartir nuestro programa de festivales al parque, una experiencia profundamente exitosa y que funciona como un modelo para otras ciudades de Latinoamérica. El proyecto surgió hace 17 años y permite tener plataformas masivas para mostrar el talento de los músicos locales”, dice Santiago Trujillo.
Respecto a sus expectativas en la FIM, comenta: “Es una oportunidad para establecer diálogos y promover intercambios de propuestas musicales”.
La FIM está lista para ser el punto de encuentro y enlace entre los diferentes componentes que integran esta industria, y claro está, un espacio dedicado por completo a disfrutar una de las manifestaciones más poderosas dentro del arte.
Los organizadores esperan que las jornadas sean intensas, con la mira puesta hacia una nueva ruta para la música.

Una voz desde la independencia
El papel que desempeñan los sellos discográficos independientes ha sido el verdadero semillero de propuestas musicales con calidad. En el ámbito internacional, sellos como 4AD, Beggars Banquet, Wax Trax, Warp, Matador y Thrill Jockey, constituyen un buen ejemplo de la importancia y trascendencia que estas empresas tienen.
En México, uno de los sellos activos y que concentra un interesante catálogo es Intolerancia. Su director es Gerry Rosado, uno de los productores más reconocidos en esta escena y que ha trabajado de cerca con agrupaciones como San Pascualito Rey, Jessy Bulbo, Los Dorados y Descartes a Kant. Gerry Rosado participará en el encuentro profesional que tratará el tema “Disqueras independientes”.
Sobre los puntos que analizará en la FIM y su visión sobre la industria de la música, Gerry Rosado comenta: “Veremos la dirección que están tomando las disqueras independientes, a las que ya no debe llamárseles disqueras. Ahora se les debe buscar una definición intermedia, pero que sobre todo, estos proyectos cumplan un papel que sea útil para los grupos o solistas”. Rosado indica: “Lo que se conoce con el concepto de industria definitivamente despareció, en el sentido de que existen pocos puestos de trabajo generados por la derrama financiera de la venta de música. Me parece que lo que se conoció como industria, en muchas ocasiones respondió a intereses más simples y rastreros”.

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