En el continente con la mayor cantidad de habitantes en situación de pobreza se encuentra la región más pobre del mundo. Una región en la que sus habitantes sobreviven con menos de un dólar al día y donde el acceso a la educación o a un sistema de salud es prácticamente nulo, el Cuerno de ífrica.
De acuerdo con información de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), en la región compuesta por los países de Somalia, Djibouti, Etiopía y Kenya existen 12.5 millones personas en situación de emergencia debido a la falta de alimentos.
Esta situación, que no es nueva, se ha intensificado por el elevado precio de los cereales a nivel local, una excesiva mortalidad del ganado, los conflictos y el acceso restringido a la ayuda humanitaria en algunas zonas.
La representante de la FAO en México, Nuria Urquía Fernández, aseguró en entrevista para La gaceta, que dicha organización había ya advertido del posible panorama, luego de que en los meses de octubre a diciembre de 2010 se registrara en aquella región una de las temporadas más secas en los últimos 60 años.
“Desafortunadamente, las crisis humanitarias que surgen de forma paulatina, como el empeoramiento de la sequía en el Cuerno de ífrica, reciben generalmente menos atención financiera y mediática que otros desastres y tragedias, como terremotos e inundaciones súbitas. La extensa situación de emergencia, en particular en Somalia, ha sido motivo de preocupación por un largo tiempo”, afirmó.
Suponiendo que las condiciones del siguiente temporal, que inicia en el mes de octubre, sean buenas, podrían recuperarse los precios de los granos que han estado aumentando en los últimos meses, de no ser así, seguirán empeorando.
“La FAO y otras organizaciones en el terreno están trabajando en un enfoque de doble vía. Por un lado se debe dar respuesta a las necesidades inmediatas como la alimentación a través de ayuda alimentaria. Por otro lado, debemos asegurar que a largo plazo podamos brindar a las personas las herramientas necesarias para responder a la crisis. Crear capacidad de resistencia en el sector agrícola será una de las estrategias centrales de supervivencia para la región”, aseveró Urquía Fernández.
Según el informe Pérdidas y desperdicio de alimentos en el mundo que fue encargado por la FAO al Instituto Sueco de Alimentos y Biotecnología (SIK), publicado en mayo de 2011, cerca de un tercio de los alimentos que se producen cada año en el mundo para el consumo humano, aproximadamente mil 300 millones de toneladas se pierden o se desperdician.
“La educación en las escuelas y las iniciativas políticas son posibles puntos de partida para cambiar la actitud de los consumidores ante el desperdicio de alimentos. Debemos aprender que los alimentos innecesariamente es algo verdaderamente inaceptable”, agregó la representante.
Junto con Somalia, otros 30 países eran considerados por la FAO -en junio de 2011-, como países que requieren asistencia alimentaria externa. Dentro de los posibles motivos se encuentra una caída importante en la producción alimentaria debido a desastres naturales, plagas o puede deberse también a que las familias no cuentan con dinero suficiente para acceder a los alimentos, ya que no pueden comprarlos en los mercados locales debido a la pobreza o a precios excesivamente altos.
Millones para salvar a millones
Durante una cumbre llevada a cabo en Adis Abeba, el pasado 25 de agosto, los líderes africanos prometieron más de 350 millones de dólares para las personas que sufren de los efectos de la sequía y hambruna en el Cuerno de ífrica, este fondo viene del Banco de Desarrollo Africano. Sin embargo, no se acerca a la cantidad necesaria para solventar la situación, ya que la Unión Africana estima que se requieren 2.4 mil millones de dólares.
Las principales instituciones por las que se pueden realizar aportaciones desde México son: FAO México, Cruz Roja, Médicos sin fronteras, Cáritas Diocesana, Manos Unidas, UNICEF y los medios para hacerlo pueden ser consultados en sus sitios en internet.
Al respecto de estas acciones llevadas a cabo por el gobierno y por otros organismos como la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el maestro en Ciencias Políticas por la Universidad de Salamanca, Gibbran Montero comentó que son simplemente insuficientes.
“Las medidas que se están tomando tanto en el interior de ífrica como en los órganos multilaterales como Unión Africana y los esfuerzos internacionales a través de Naciones Unidas de la Cruz Roja son necesarios, pero lamentablemente son insuficientes, obviamente el problema no viene de hace 6 meses, es un problema que se ha ido empeorando con el paso de los días y se tienen que tomar medidas mucho más contundentes”.
Emergencia sociopolítica
De acuerdo con el maestro Gibbran Montero, quien funge también como profesor de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, en la Universidad Nacional Autónoma de México, los movimientos armados en aquella región, principalmente en Somalia, empeoran la situación, ya que provoca, entre otras cosas, que la gente emigre hacia otros países.
“De esta forma se contagia esta inestabilidad política y social a otras partes del continente, esto es muy peligroso porque muchos ciudadanos van a ir en busca de comida, de agua y de seguridad a otros países vecinos, lo cual va a expandir este problema”, aseguró.
Actualmente son alrededor de mil 300 los refugiados de Somalia que emigran principalmente hacia Kenya, lo que obliga a otros a tomar medidas para controlarlo.
El profesor de la UNAM, advirtió que este fenómeno migratorio podría expandirse también hacia el continente europeo y puntualizó que la situación de pobreza en el Cuerno de ífrica tendrá repercusiones sociales y políticas no sólo en esa región sino en todo el continente africano.
“Definitivamente es un panorama desolador, se han hecho a lo largo de los años, diversos esfuerzos y diversas declaraciones internacionales, se han firmado convenios para combatir la pobreza, hay que recordar que no solo es problema de ífrica, es un problema que enfrentan muchos países a nivel mundial”, comentó al respecto del papel que pueda desempeñar la comunidad internacional.
Asimismo, Gibbrán Montero quien imparte una materia enfocada al ífrica, hizo énfasis en la necesidad y la importancia de que sean los mismos gobiernos africanos los que propongan y lleven a cabo los proyectos.
Por otra parte, recordó que desde 1992 la ONU no había utilizado el término de hambruna para definir la situación en alguna región y ahora lo hizo para declarar así a dos regiones en Somalia.
