Imágenes que engañan

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Imágenes que causan sorpresa, oscilando entre la realidad y lo ficticio, es lo que muestra en más de 20 fotografías Stanley Shoemaker, en casa Escorza. Algunas fotos llevan a la reflexión por sus implicaciones económicas y culturales, como “Dicotomía”, en la que un conjunto de edificios colindan con un lago. Una pequeña embarcación y dos endebles lanchas descansan sobre tranquilas aguas.
“Ahí trato de reflejar la diferencia entre culturas, entre los países desarrollados y los subdesarrollados. Capto el contraste rural y urbano que hay en diferentes lugares del mundo”.
Los edificios fueron captados por la lente de Shoemaker en Hong Kong. En Camboya tomó fotografías a las lanchas, y el lago es mexicano.
No todos los temas tienen las mismas motivaciones. “Estoy tan preocupado porque estéticamente esté bien lograda la imagen, que a veces olvido qué es. Suele suceder que el resultado es diferente al que yo tenía pensado”.
Hay algunas fotos que fueron armadas en un proceso de visualización, como la de ese sujeto que camina sobre un edificio en picada. “Para ésta simplemente combiné las imágenes y sentí la perspectiva”.
La exposición, aunque trata muchos temas, tiene como generalidad los paisajes alterados. El autor combinó elementos diversos para crear mundos paralelos. Cada fotografía es independiente de las otras, por lo que no pueden en-globarse en unas cuantas palabras. Las imágenes hablan por sí solas.

Influencia de Magritte
Para hacer posible su exposición, Shoemaker primero se enfocó en la técnica y en la luz para determinar si las imágenes sueltas encajaban entre sí. Posteriormente extrajo elementos de distintas fotografías, los juntó para determinar si había armonía entre éstos. “Suele suceder que es desconocido el resultado que va a obtenerse.
Antes de combinar imágenes, el fotógrafo toma su cámara para captar lo que a él le gusta. Para combinar los elementos ejerce influencia la imaginación. “Es lo que guía mi trabajo hacia cierto concepto”.
Las fotografías son tomadas a color para lograr un trabajo limpio. Luego son pasadas a blanco y negro, ya que al autor no le importa propagar la psicología del color. “No quiero que una camisa roja llame, en un momento dado, más la atención que los elementos que trato de mostrar. Además, es más fácil empalmar las imágenes cuando están en blanco y negro. También trato de hacer las tomas en un mismo ángulo y una misma hora, para que la luz salga técnicamente bien realizada”.
En el material expuesto pueden captarse influencias de René Magritte, en el manejo de las nubes, en esos paisajes suspendidos entre el cielo y la tierra, los elementos naturales, los horizontes. El autor aísla elementos para causar la sensación de que son independientes, cuando en realidad no lo son.
René Magritte fue un pintor surrealista belga que jugando con imágenes ambiguas dotó al surrealismo de una carga conceptual.
No es la primera ocasión que Stanley Shoemaker altera fotografías. Todo empezó en 2007, cuando realizaba un trabajo de exposición múltiple. “Quería combinar un cielo que estaba totalmente sobreexpuesto en una fotografía, y de ahí me puse a jugar con las imágenes. La manipulación de las mismas me atrajo. Descubrí que podía haber en ello un sentido y un resultado diferente a la fotografía tradicional, y eso me llamó poderosamente la atención”.
Las fotografías expuestas son de 20 por 30 pulgadas. Las imágenes que las componen fueron tomadas a partir de 2010, en México, Estados Unidos, Tailandia, Camboya y Hong Kong.
El autor es de nacionalidad mexicana. Nació en Morelia, Michoacán, el 10 de octubre de 1979 y tiene alrededor de 10 años como fotógrafo. Fue finalista en el Emerging photo pro, en Concurso internacional de fotografía revista digital pro 2011 y ganó el primer lugar en la Bienal Internacional de Fotografía Ecuador 2011. Ha expuesto en Estados Unidos, Argentina, Ecuador, en ciudades mexicanas como Monterrey, Morelia y Chihuaha.
Paisajes alterados será llevada posteriormente a Puebla y Morelia.

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