El oficio del periodismo

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La inclusión de las nuevas tecnologías en el periodismo obligan a los medios de comunicación a replantear el tipo de contenidos que van a publicar, pues éstas sólo deben ser vistas únicamente como herramientas de trabajo, advirtió la periodista de revistas como El País Semanal y Letras Libres, Leila Guerriero.
Durante su participación en el panel de ganadores del Premio Cemex-Nuevo Periodismo Iberoamericano, organizado por la UdeG y que tuvo lugar en el Paraninfo Enrique Díaz de León el pasado 23 de septiembre, la periodista argentina señaló que el mundo de la comunicación está más preocupado por incluir plataforma tecnológicas innovadoras que por la información que van a meter en ellas.
Guerriero, quien obtuvo el primer lugar de dicho concurso por su texto “Rastro en los huesos”, publicado en la revista Gatopardo, aseveró que contrario a lo que los algunos medios quieren hacer creer, no cualquiera puede hacer periodismo por el hecho de escribir un blog o publicar fotos y videos de hechos noticiosos.
“Hay pasos del reporteo que se tienen que aprender no sólo en la universidad, sino de oficio. Volcar las historias en un papel, saber hacerlo de una manera equilibrada que tenga varios puntos de acceso. Los blogs no son sinónimo de periodismo. Enterarse de algo en twitter no significa que sea periodismo porque no aportan una mirada a las historias, lo que si hace un reportero”.
Por su parte, Alejandro Cossío, mexicano ganador del premio Cemex- FNPI en la categoría de fotografía por su serie “México, en el punto de quiebre”, publicado en el semanario Zeta y las agencias AFP y EFE, se mostró a favor de que los periodistas generen credibilidad y respeto entre sus lectores para contrarrestar lo que definió como una sobresaturación de información en internet y los dispositivos móviles.
Convocado a este panel, realizado como parte de las actividades del Seminario Permanente de Periodismo de la Universidad de Guadalajara, dijo que la tecnología puede ser utilizada de una manera favorable para el oficio periodístico, pero cuidando siempre de utilizar fuentes creíbles que abonen a la calidad del trabajo final.
“Con el tiempo los que hagan periodismo lograrán convencer al lector ganándose su respeto, porque ellos podrán comparar y cerciorarse que la información que están proporcionando es de calidad. Es una manera de hacer un periodismo que puede ser seguido y que se distinguirá de los demás que hacen sólo blogs”.
Presente en la mesa de debate, Jaime Abello Banfil, fundador y director del FNPI, dijo que los trabajos de ambos ganadores fueron elegidos, porque representan “la clase de periodismo que queremos impulsar en la fundación, caracterizada por un trabajo de reporteo e investigación muy cuidadosos, cuyo resultado se convierte en un periodismo útil, atractivo y genera más conocimiento”.
Abello se mostró en desacuerdo con la editorial publicada por El Diario de Juárez, en la que pide una tregua a los grupos de narcotraficante en Chihuahua luego de una pregunta hecha por uno de los estudiantes de las carreras de comunicación pública y derecho presentes en el Paraninfo.
“Respeto su posición pero no la comparto, eso de ‘pedirle cacao’ a los criminales es muy complicado. Las demandas deben de ser hacia la sociedad y las autoridades, en una construcción colectiva para evitar que hayan estas situaciones y para solucionar los problemas.
El gremio tendría que unirse, trabajar juntos, solidarizarse, crear mecanismos asociativos de protección que se establezcan no a nivel individual sino a nivel institucional con acuerdos y mecanismos de protección que funcionen”.
Reiteró el llamado a la solidaridad de los periodistas internacionales hecho durante la entrega del premio Cemex- Nuevo Periodismo Iberoamericano el pasado martes 21 de septiembre en la ciudad de Monterrey.
“Sabemos que los peligros para periodismo se han multiplica en México, no sólo por parte de los criminales, sino también de los policías, e incluso de quienes son traicionados por sus propios colegas”.

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