El nuevo papel del lirio

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Como parte de la apuesta curricular proyectada al mundo laboral, un grupo de jóvenes de las licenciaturas en Químico farmacobiólogo (QFB) e Ingeniería química, del Centro Universitario de la Ciénega, desarrollaron un proyecto que logró extraer celulosa del lirio, para convertirla en papel de una manera sencilla, práctica y barata.

A partir de los trabajos realizados en conjunto, los alumnos están llevando, con la coordinación de sus profesores, este proyecto más allá de los límites escolares, convirtiendo la plaga más importante del agua en la región Ciénega, en un recurso rentable.

“Nos dimos cuenta de que el problema del lirio era un tema importante para la región. Por ejemplo, en Ocotlán, en el río Zula, es una constante visible. La proliferación de lirio daña a la fauna del ecosistema y la calidad del agua. Llegamos a la conclusión de que sería interesante experimentar con la celulosa del lirio y ver si podíamos lograr que el papel obtenido fuera funcional y estuviera listo para usarlo de manera cotidiana o comercial”, menciona Alonso Aguas Zúñiga, estudiante del tercer semestre en la licenciatura de QFB, quien participó en los primeros experimentos.

La celulosa es un compuesto presente en todas las plantas, en mayor o menor porcentaje. El lirio cuenta con una cantidad considerable de esta sustancia en el tallo: un 60 por ciento de su totalidad como planta. El procedimiento que el grupo en CUCiénega siguió, después de la investigación y la experimentación, es casi casero, no tiene mucho costo y dura alrededor de dos días en culminarse.

Alonso Aguas explica: “El proceso es simple. La primera prueba salió bien. Ya blanqueamos el papel que salió y queremos hacerlo más flexible. Usamos la planta entera, que contiene celulosa en todo su cuerpo. Así evitamos los residuos, que después volverían a contaminar”.

El proceso culmina con el análisis toxicológico. En este sentido, una de las dificultades que enfrentaron, fue la falta del equipo necesario para la detección de metales, porque el experimento debe pasar por ciertas normas para que el papel resultante no contenga cantidades no permitidas de plomo y otros metales pesados, para poder comercializarlo, lo cual es la meta del proyecto.

Yamile López Cervantes, alumna de Fisicoquímica, encargada de la normatividad del experimento, menciona que, pese a ser un proyecto simple, las pruebas de toxicidad son un plus: “Es que el lirio absorbe ciertos minerales y éstos pueden ser tóxicos. Aquí en el río Zula, la planta se encuentra en aguas residuales, donde las fábricas tiran sus desechos. Queremos hacer pruebas para ver cuántas partes por millón de metales pesados existen en las plantas, para luego ver a qué público lo vamos a ofrecer. Si tiene metales, no funcionaría para un alimento, pero podría ser ideal para hacer hojas para escribir o cartón. Ahora aplicamos la normatividad para poder comenzar a sacarlo del laboratorio. El papel, básicamente ya está”.

Comenta que el proyecto es rentable y amable con el medio ambiente, por lo cual espera que haya empresas interesadas en invertir en su implementación para crear papel: “El lirio no es útil para nada más. Creo que el procedimiento es simple y con la normatividad y el trabajo, puede funcionar bien en la región Ciénega, donde es una plaga que afecta el ecosistema”.

Alonso Aguas considera que éste puede ser un proyecto que convenga al ayuntamiento de Ocotlán, en donde han invertido en los últimos años más de 36 mil pesos en recolección de lirio: “Nos gustaría buscar ayuda, por ejemplo, del gobierno de Ocotlán, para sacar lirio. Se tiene que pedir un permiso, como el que sacamos para el experimento, pero si queremos hacerlo a futuro, tendríamos que colaborar de la mano”.

Lucila del Carmen Arias Patiño, profesora de este centro universitario y coordinadora del proyecto, reiteró su importancia: “Queremos que los alumnos entiendan la magnitud del problema al que nos enfrentamos en la región y que como comunidad estudiantil, en conjunto, estemos desarrollando nuevos productos. No sólo abatiríamos la proliferación de lirio y sus consecuencias, sino haremos de este experimento una manera de acercar los alumnos a la profesionalización”.

Menciona que canalizarán el proyecto al área de vinculación para que participe en convocatorias y, así los alumnos obtengan recursos como recompensa de su trabajo y fuentes para que el proyecto crezca.

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