Las ambivalencias del IEPS

597

En el supuesto caso de que sea eliminado el cobro del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) a gasolinas, esto podría constituir un golpe para la Secretaría de Hacienda, que dejaría de tener ingresos en ese rubro, explicó Jorge Antonio Mejía Rodríguez, profesor investigador del Centro Universitario de Ciencias Económico Administrativas (CUCEA).

El comentario surgió ante la posibilidad sugerida por algunos especialistas de que el IEPS fuese eliminado en 2018, ya que no podría subsistir en un ambiente de competencia económica, en que los precios de la gasolina sean liberados.

En este hipotético escenario, y de seguir a la baja los precios del petróleo, Hacienda podría buscar mecanismos y ajustes. Por ejemplo, al propio IEPS, vía ingresos de otros productos para tratar de resarcir la pérdida, afirmó Jorge Antonio Mejía.

El IEPS representa un 15 por ciento de los ingresos totales del país y tiene dos componentes: los petroleros y los que no lo son. Este último incluye la comida chatarra, alcohol y tabaco.

El crecimiento de ingresos a nivel federal por cobro del IEPS de 2014 al 2015, fue de 208 por ciento: el año pasado recaudaron 354 mil 252 millones de pesos por ambos componentes.

En cuanto a la gasolina, el investigador destacó que la liberación de su costo implicaría, entre otros aspectos, que la Secretaría de Hacienda dejaría de fijar el precio y éste lo determinarían las condiciones del mercado.

La tendencia a la baja del costo del petróleo en el ámbito internacional, no impacta de manera significativa el precio de las gasolinas en México a favor del consumidor, a causa de otros aspectos, entre éstos el cobro del IEPS.

Detalló que en 2015 el 52.3 por ciento que lograron captar por cobro del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios en México, corresponde al aplicado a gasolinas y diesel, conceptos en los que recaudaron 220 mil 90 millones de pesos en 2015. Esto implica un crecimiento en las percepciones por IEPS con respecto a 2014, cuando el saldo referido a gasolinas y diésel fue negativo, ya que en 2014, explicó Mejía Rodríguez, las gasolinas eran más caras en el mercado internacional, por lo que Hacienda tuvo que aplicar un subsidio por un monto de 12 mil 846 millones de pesos, para que no aumentara su precio en demasía.
   
¿Cómo es determinado el precio de la gasolina?
El 1º de enero fue reducido en un 3 por ciento el precio de las gasolinas. El litro de la Magna se ubicó en 13.16 pesos, la Premium en 13.98 pesos y el diesel en 13.77. Para febrero solo la Premium bajó su costo; los precios máximos aplicables a la gasolina Magna y el diesel se mantuvieron en los mismos niveles de enero, en tanto que la gasolina Premium registró una reducción de tres centavos por litro, para ubicarse en 13.95.

Antonio Ruiz Porras, coordinador del doctorado en Estudios Económicos, del CUCEA, afirmó que el precio de la gasolina en México está determinado, entre otros aspectos, por el margen comercial, el costo del trasporte, más una cuota por combustibles fósiles, el IVA, el IEPS, las potenciales mermas en el producto, además de las mermas a cuotas estatales. De ahí que la gasolina en el país sea más cara que en otros países.

El Diario Oficial de la Federación establece para este año variaciones a la alza y a la baja en el precio del petróleo de un tres por ciento. Ello quiere decir que puede aumentar o decrecer por ese porcentaje. Por lo tanto el país no podrá alinearse a las tendencias del mercado.

Ruiz Porras explicó que este año los precios dependerán, además del desempeño de la inflación, de las condiciones del mercado internacional.

Aclaró que la gasolina en las zonas fronterizas es más barata que en el centro del país, ya que las personas que viven en la frontera llenarían su tanque en Estados Unidos si la gasolina en México fuera más cara.

Artículo anteriorInformes sobre la Situación Económica, las Finanzas Públicas y la Deuda Pública
Artículo siguienteReglamento del Programa de Estímulos al Desempeño Docente