Las memorias de vida y familiares, su labor académica y de ingeniería civil, en la que destaca el suministro de agua potable a Guadalajara desde el lago de Chapala, formaron parte de los discursos para recordar al trigésimo cuarto rector de la Universidad de Guadalajara, ingeniero Jorge Matute Remus, en el 103 aniversario de su natalicio.
Durante una ceremonia realizada el pasado martes en la Rotonda de los Jaliscienses Ilustres, la hija del también político tapatío, Elena Matute Villaseñor, habló del sentido del deber, de su dedicación al bien público y de la confianza que dio a sus hijos. Leyó un escrito de su nieto Jorge, quien habló de la generosidad de su abuelo: “Tenía una visión a futuro, compartida e incluyente, necesaria para cambiar el presente, para bien”.
El ingeniero Juan Armando Duarte Alonso, presidente de la generación de ingenieros 1962-1967, subrayó que Matute Remus, doctor Honoris causa por la UdeG, fue un “auténtico maestro”.
“Hoy recordamos el movimiento de la telefónica en octubre de 1950, realizado en una semana: de un martes a un sábado, en que se movió el edificio de mil 700 toneladas en una longitud de 12 metros”.
La coordinadora general administrativa de la UdeG, maestra Carmen Rodríguez Armenta, en entrevista afirmó que, como académico, rector y funcionario público, “siempre fue un ejemplo, además de un visionario, un ejemplo de compromiso hacia la sociedad”.
