La vida misma

Lorenza Aranguren

La artista plástica tapatía hace una confrontación al momento de resiliencia que vivió tras un tema personal de salud en la muestra In situ, que se exhibe en el Museo de las Artes de la Universidad de Guadalajara hasta el 20 de octubre. Se trata de 60 piezas de arte gráfico, cerámico y textil que muestran el proceso de renacimiento de la autora, quien se abocó al arte para sanar

Escaleras

Tuve un problema de salud y las escaleras se hicieron como una obsesión, una fobia, entonces aparecen por todos lados en la muestra. Las muestro recortadas, perdidas, trato de no hacer la imagen evidente. Normalmente soy más abstracta, lo que pasa es que quise hacer evidentes los pasos del caminante. Se convirtió en un monstruo porque físicamente no podía moverme bien y luego esa vivencia de sentir que te vas a algo profundo da mucho miedo. Sí es un miedo que he ido superando, pero sentí la necesidad de manifestarlo. En una de las obras cerámicas se muestra el trabajo que me cuestan todavía, después de año y medio, las escaleras. En dicha obra tenemos una imagen impresa en la cerámica, que es la imagen de un montacargas que yo tengo en mi taller. Entonces se convierte en la alegoría del montacargas que se hizo escalera.

Avanzar

Son imágenes concretas y las trato de abstraer; quise intervenirlas de alguna manera y esconderlas un poco y siempre dejar en evidencia, estos pasos que da un hombre que va siempre hacia adelante, como símbolo de estar delante, de caminar adelante, o sea, de que tienes que avanzar en la vida: todo por delante nada por atrás. Entonces en las obras siempre están rodeadas las imágenes de ruedas de la fortuna, de árboles secos, de ciudades muy muy habitadas. Hablan sobre silencios, sobre saturación y sobre estar presentes, estar “in situ”. Espero que la gente se lleve la idea con estas imágenes que siempre se pueden lograr las cosas, que se puede salir adelante.

Azul

El azul en la serie de pinturas al óleo no lo pensé mucho, realmente fue un color que quise empezar a trabajar de una manera muy natural, pero claro, que cuando ya le estudias un poquito te lleva a una cuestión más espiritual. Entonces quedé muy contenta con el resultado, normalmente es un color que yo no usaba mucho. Una de las piezas de la serie de cuadros es la única que está titulada como “Renacer” y es como un resurgimiento mío, físicamente y seguramente también en mi trabajo.

Logro

El arte ayuda muchísimo, el arte realmente sana; me acabó de sanar el preparar todo esto y manifestarlo, porque a veces es difícil manifestar lo que te está pasando y fue una buena manera de hacerlo.

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