migrantes
Foto: Abraham Aréchiga

María es una hondureña que fue obligada a desplazarse de su hogar en busca de mejores oportunidades, y su testimonio como migrante se ha traducido en manifestaciones artísticas para dar visibilidad a mujeres y niñas migrantes.

Ésta y otras historias fueron recolectados como parte de los proyectos en los que colaboran investigadores y alumnos del Cuerpo Académico de Estudios Contemporáneos del Arte, del Centro Universitario de Arte, Arquitectura y Diseño (CUAAD), en conjunto con docentes de la Universidad de la República, de Uruguay.

En estos proyectos, estudiantes, artistas y docentes exploran la realidad que enfrentan niñas y mujeres migrantes en la búsqueda de su bienestar; estas experiencias son plasmadas en distintas representaciones artísticas para mostrar los obstáculos que viven.

“A los estudiantes los ponemos en contacto con fenómenos y problemas de índole regional, nacional e internacional, en los que el arte puede ser una herramienta fundamental para la reconfiguración de lo que imaginamos y, por lo tanto, de las conductas sociales”, explicó el profesor del Departamento de Teorías e Historias del CUAAD, Jorge Octavio Ocaranza Velasco.

Foto: Gustavo Alfonzo

Detalló que estas experiencias se han plasmado en la realización de exposiciones y obras de teatro, o en la creación de guiones que, posteriormente, se convertirán en filmes que abordarán la vida de mujeres y niñas migrantes.

“Desde 2021 hemos venido trabajando en el fenómeno de la migración, pero bajo la perspectiva de los ‘invisibles del paisaje’, como estas personas que están en situación transitoria de migración y que debido a imaginarios hegemónicos, la sociedad los percibe de una manera distorsionada, indolente y falseada”, aseveró Ocaranza Velasco.

Los trabajos y resultados de la investigación también tienen potencial para ser usados como proyectos de titulación o han sido expuestos en recintos como el Museo de las Artes, agregó el investigador.

Un trabajo interdisciplinario

La docente del Centro Universitario de Rivera, de la Universidad de la República, Magali Ivañez, explicó que desde aquella institución se pensó en abordar la problemática de la migración con una perspectiva de género para abonar a la reflexión.

“Es importante destacar la interdisciplinariedad en el análisis de este fenómeno. Hemos planteado la necesidad de colocar al arte como un recurso de cambio, porque hoy el arte no trabaja solo, sino que se ha dedicado a analizar las crisis globales”, aseveró.

La investigadora resaltó que estas intervenciones no sólo buscan dar visibilidad a través del arte, sino que sirve como una alternativa para proponer cambios que impacten en la sociedad.

Fotografía: Fernanda Velazquez

Sebastián Güida, docente del mismo centro universitario uruguayo, mencionó que los proyectos en los que ha colaborado esa institución no se limitan a manifestaciones artísticas, sino que también se han convertido en acciones que buscan repercutir en las y los tomadores de decisiones.

Estos proyectos artísticos de investigación se han consolidado como propuestas educativas orientadas hacia la promoción de los derechos humanos y el bienestar social. “De cada uno de estos cursos han surgido herramientas pedagógicas que también son arte y que se pueden compartir para llegar a muchos lugares”, externó.

Una realidad cotidiana

El trabajo de investigación para elaborar estos proyectos se ha centrado en conocer la realidad de las mujeres migrantes y, a la par, se trabaja en la propuesta de ideas artísticas para abordar estas historias, declaró Claudia Berdejo Pérez, profesora del Departamento de Artes Visuales del CUAAD.

La investigadora puntualizó que uno de estos trabajos fue la obra de teatro Camino rojoque se exhibió en octubre pasado en la Universidad de la República y que se espera que pronto sea mostrada en México. Se trata de un trabajo documental que hace un seguimiento a una de las mujeres migrantes.

Berdejo Pérez consideró que es una dramaturgia viva que sigue en construcción, al igual que el camino de la protagonista, y añadió que las mujeres migrantes han emprendido su viaje debido a cuestiones como violencia en el hogar o el desplazamiento por razones de seguridad; sin embargo, con estos productos artísticos se busca evitar victimizarlas, por lo que se apuesta por emplear el arte en destacar sus fortalezas.

“Desde el arte ofrecemos elementos que incentiven estas nuevas lecturas del mundo observado y que se promuevan, a través del lenguaje, los derechos de las mujeres que migran”, indicó Berdejo Pérez.

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