La especialidad en Medicina Pediátrica Paliativa es el nuevo programa educativo, único en su tipo en el país, que será ofrecido a partir del ciclo escolar 2024 «A» en el Centro Universitario de Ciencias de la Salud (CUCS) y será impartido en el Hospital Civil de Guadalajara Dr. Juan I. Menchaca y el Hospital General de Occidente.

En rueda de prensa el Rector de este centro universitario, José Francisco Muñoz Valle expresó que la especialidad fue desarrollada por médicos de alto nivel y pone en alto el nombre de los programas educativos en el área de la salud.

“Responde a una necesidad urgente y a una deuda hacia los niños y las familias, los cuidados paliativos pediátricos se consideran como el cuidado total activo del cuerpo, la mente y el espíritu del niño, y también implica brindar apoyo a la familia”, señaló.

Añadió que los cuidados paliativos comienzan desde el diagnóstico la enfermedad y continúan independientemente de si el niño recibe o no tratamiento dirigido a la enfermedad.

Los proveedores de salud deben evaluar y aliviar la angustia física, psicológica y social de un niño. Requieren un amplio enfoque interdisciplinario que incluya a la familia y haga uso de los recursos comunitarios disponibles.

“A nivel internacional más de 21 millones de niños requieren de estos cuidados y 8 millones de servicios especializados. En México, por año, 205 mil 980 niñas y niños requieren de cuidados paliativos, lo que quiere decir que viven en una condición de sufrimiento grave relacionado con su salud”, apuntó.

Dijo que desafortunadamente la atención paliativa pediátrica es aislada y escasamente integrada al sistema de salud y es por eso que se requiere de la formación de profesionales de la salud en esta área.

“Este programa permitirá formar médicos especialistas que posteriormente podrán participar en la formación de otros especialistas y atender con mejor calidad y pertinencia las necesidades de los niños y sus familias. El programa es el único a nivel nacional y el segundo en América Latina y aún queda mucho por hacer, por lo que se requiere del apoyo institucional de la Secretaria de Salud y el Sistema Nacional de Posgrado para poder contar con las becas necesarias que aseguren que los nuevos residentes puedan dedicarse de tiempo completo a este programa”, precisó.

Fotografía: Gustavo Alfonzo

Jorge Alberto Ramos Guerrero, Pediatra, Paliativista, adscrito a Medicina Paliativa y del Dolor del Hospital General de Occidente, al compartir algunas historias de niños con necesidad de este servicio, explicó que es importante sensibilizar sobre estos temas, ya que son seres humanos que al día de hoy experimentan sufrimiento asociado a enfermedades o condiciones que limitan o amenazan la vida.

“Estos servicios no son exclusivos para el final de vida, debieran de iniciar desde el diagnostico, desde la sospecha de que una enfermedad o condición grave amenaza a una familia, la búsqueda de alivio con enfoques que requieren trabajo colaborativo de muchos profesionales. Estos cuidados no son caros, requieren trabajo en equipo y solo en 25 de los 32 estados del país ofrecen estos cuidados”, dijo.

Yuriko Nakashima Paniagua, Pediatra paliativista, jefa y fundadora de la Unidad de Cuidados Paliativos Pediátricos PediPali, Hospital Civil de Guadalajara Dr. Juan I. Menchaca, recordó que la Organización Mundial de la Salud emitió hace más de 25 años le definición de estos cuidados.

“Existen varios grupos de clasificación de estos cuidados. El primero, con situaciones que amenazan la vida, para las cuales el tratamiento curativo puede ser viable, pero también puede fracasar; el grupo 2 para enfermedades que requieren largos periodos de tratamiento intensivo dirigido a prolongar la vida, pero donde todavía es posible la muerte prematura”, señalo.

Añadió que en el grupo tres para enfermedades progresivas sin opciones curativas, el tratamiento es paliativo desde el diagnóstico; el grupo 4 de situaciones irreversibles, no progresivas con grave discapacidad que conllevan una extrema vulnerabilidad de padecer complicaciones de la salud y el último grupo, para niños, por nacer con problemas de salud importantes que pueden no vivir hasta el nacimiento y bebés que pueden sobrevivir solo unas pocas horas o días, bebés con anomalías congénitas que pueden amenazar las funciones vitales.

Beatriz Verónica Panduro Espinoza, Secretaria Académica del CUCS compartió que las enfermedades complejas, crónicas llegan a causar un daño importante no sólo por la afectación en el estado de salud, sino que impacta el sano desarrollo y la calidad de vida y a las familias.

“Los niños tienen derecho a una vida sana y las instituciones tenemos la obligación de asegurar que se cumpla este derecho”, indicó.

El dictamen de aprobación de este programa y la información relacionada al mismo puede consultarse en: http://www.hcgu.udg.mx/

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