En respuesta al comentario de Yunok y su sentimiento de racismo en el país, lo considero erróneo, porque el problema no es China y sus productos, siempre y cuando paguen impuestos y cubran los estándares de calidad requeridos.
Me da gusto y orgullo saber que muchos estudiantes de otros países eligen México como hogar temporal, y que tengan el valor de conocer diferentes espacios culturales. Es innegable que donde ella esté, resaltará su diferencia física, y no creo que deba sentirse agredida, pues muchos hacemos referencia a aspectos físicos que nos diferencian de los demás.
Como dice: “Ningún país es capaz de producir todo lo que necesita”. Cierto, pero no es secreto que a México llegan grandes cantidades de productos, sin pagar los impuestos correspondientes, artículos que entran de contrabando por no pasar los estándares de calidad. En definitiva, estos son los que no deben ser comercializados en nuestra nación, porque ¡no somos el basurero de otros países!
Desde hace algunos años en Japón crearon una bebida que exportan como Tequila, pero el Tequila solo es creado en Jalisco.
Artesanías que eran fabricadas de manera exclusiva en México, ahora son producidas por personas de Oriente (fajos piteados, hebillas, etcétera), con el fin de que sean comercializados, sin tener la misa calidad.
Mi comentario hace referencia a China, no por racismo, sino porque sería incongruente hablar de Estados Unidos, Italia, Brasil o cualquier otra nación, si quiero opinar acerca del Barrio chino que quieren poner en la ciudad.
Mi objetivo principal es pedir espacios para los productos mexicanos, pues el que no enseña, no vende. Si los productos nacionales quedan rezagados o empresas mexicanas van a la quiebra, afecta mi economía, así que vuelvo a ¿por qué no, en lugar de un Barrio chino, un Mercado de lo hecho en México? n
Brenda A. Oceguera,
estudiante de derecho, CUCSH.
