La historia de amor y abandono de una monja del siglo XVII quedará para siempre en la memoria, luego de que Desierta piel, espectáculo de Jaramar Soto, llegue a la pantalla grande, bajo la dirección de Sergio Ulloa, y de ser posible presentarán la película en el próximo Festival internacional de cine.
En entrevista, la cantante menciono que la obra será distribuida en DVD.
Desde que nació el proyecto de Desierta piel, explicó la cantante Jaramar Soto, ya estaba considerado grabarlo.
“Estábamos terminando un disco y pensamos que seguía esta historia de la monja. Sin embargo, nos dimos cuenta que no podía quedarse un disco nada más, por ser una pieza visual.
“De inmediato busqué a Sergio Ulloa para ver si tenía interés en incorporarse a este proyecto. Conforme fuimos platicando más y fue descubriendo de qué asunto hablábamos, vimos que iba a ser un largometraje.
“Queríamos que fuera algo más, una expresión artística con lenguaje cinematográfico. Por esto tendrá rodajes en un foro, como si reprodujera el escenario, aunque también habrá trabajo en locaciones.
“Sergio Ulloa tiene la libertad para aportar y transformar la historia en su aspecto visual, aun cuando haya una misma base. Será como un video clip, pero de una hora”.
Las labores comenzarán a partir de agosto o septiembre, cuando los músicos entren al estudio para grabar la banda sonora del filme, misma que será utilizada después como play back.
Esperan que la filmación comience en enero, aunque eso dependerá de que la Universidad de Guadalajara apoye este proyecto. En este sentido, en los próximos días harán una presentación del mismo a los funcionarios universitarios.
“La ayuda fundamental provendrá de la Universidad, porque ha estado involucrada desde que surgieron nuestras necesidades económicas.
“Esta casa de estudios posee la infraestructura para llevar a cabo la producción. Pensamos rodar en el foro de su escuela de cine, en enero, porque está más desocupado.
De acuerdo con Jaramar, la grabación de la película será en alta definición, un formato más avanzado de video y menos costoso que el utilizado en cine.
La historia
“Partimos de cinco cartas del siglo XVII, parece que escritas por una monja portuguesa. Y digo que parece, porque da la impresión de que fueron hechas por el editor francés que las publicó en el mismo siglo XVII, en París.
“Esta persona recibió su inspiración de la historia de amor entre una monja y un militar francés, quien después de vivir una relación apasionada, regresa en su barco a Francia. Ella queda sola, adolorida y desesperada, de manera que escribe cinco cartas a su amado, misivas que usamos como punto de inicio”.
A partir de estas cartas, Natalie Braux, clarinetista y saxofonista, trabajó en la música. Sin embargo, como existe un antecedente, pensaron en realizar un espectáculo más completo.
Jaramar y su equipo de músicos invitaron a artistas de diferentes disciplinas, con el objetivo de cerrar el círculo planteado por la historia y la idea inicial. De esta forma incorporaron a Karla Sandomingo, quien escribió algunos textos para que fueran incluidos en el montaje.
“Víctor Guzmán (escenógrafo) creó una obra plástica para transmitir la idea de enclaustramiento, soledad y reflexión, misma que debía mostrar símbolos de una mujer cuyo amante partió por el agua, por el mar.
“Trabajé también con un director teatral, Miguel Lugo, que me estuvo ayudando a explorar las posibilidades escénicas, y con una bailarina, Gabriela Cuevas, para el movimiento escénico”.
