Foto: Abraham Aréchiga

Con el objetivo central de reeducar a la sociedad y mejorar su relación con el medio ambiente, la Universidad de Guadalajara (UdeG) presenta su Colección Biológica Itinerante, la más grande de América Latina, en la explanada del edificio de Rectoría General.

La Coordinadora de Fomento al Desarrollo Integral, Marcela Hernández Aguayo, explicó que este esfuerzo fue posible con la colaboración del Centro Universitario de la Costa Sur (CUCSur).

“Esta muestra busca desmitificar muchas ideas, creencias, y sobre todo erradicar el maltrato que estamos teniendo hacia la flora y la fauna”, dijo Hernández Aguayo.

La exposición, que se estima reúne alrededor de tres mil especies, incluye insectos, reptiles, mamíferos y aves, y ofrece una oportunidad única de conocimiento. 

Esta tercera edición de la exposición de la colección en la explanada del Edificio de Rectoría General, trasciende el ámbito universitario para llegar a todo el público, en especial durante la Vía RecreActiva dominical, con la que coincide por primera vez. 

La iniciativa parte de una convicción fundamental: conocer para cuidar. “No puedes cuidar, ni puedes amar lo que no conoces; de ahí la intención de que los visitantes aprendan a revalorar el ecosistema”, subrayó Hernández Aguayo.

El investigador del CUCSur y encargado de la colección, Luis Eugenio Rivera Cervantes, dijo que México está en los primeros lugares de biodiversidad en el mundo, pero la falta de conocimientos generan desinformación y daño a la naturaleza.

Por un lado, explicó Rivera Cervantes, las personas de las ciudades están desligadas de la naturaleza y, muchas veces, todo lo que ven les parece extraño y quieren aniquilarlo

“Y, por el otro lado, tienes a la gente que vive en las zonas rurales que arrastra una serie de mitos, como el relacionado con las serpientes que succionan leche, o que matan por el aliento. Entonces, lo que necesitamos es educar y concientizar”, resaltó el investigador.

Con este objetivo nació, hace 18 años, la única Colección biológica itinerante en América, cuya misión ha sido llevar el conocimiento directamente a las comunidades, escuelas y zonas indígenas.

“Porque cuando uno quiere ir a conocer algo del mundo natural, tiene que ir a un museo. Pero, ¿qué hacemos cuando la mitad de nuestra población vive en la pobreza, sin la posibilidad de poder pagar una entrada a un súper museo?”, cuestionó el científico.

El proyecto representa un gran esfuerzo para cerrar la brecha entre la sociedad y su patrimonio natural

La colección incluye especies únicas de flora y fauna que no existen en ningún otro lugar del planeta.

La muestra, con entrada gratuita, estará a disposición de todo público el domingo 7 y el lunes 8 de diciembre, de 10:00 a 16:00 horas.

Artículo anteriorFIL 2025 supera récord de visitantes
Artículo siguienteAdéu, Barcelona; benvenuta Italia a la FIL 2026