La importancia de verbalizar el sonido

El trabajo sonoro debe iniciar desde las etapas de preproducción e ir de la mano de la película, coincidieron expertos

Antes de ser realizadoras o realizadores cinematográficos; diseñadoras o diseñadores sonoros, hemos aprendido a ser escuchas en un contexto situado en una época, en un ámbito cultural, para de ahí empezar a identificar las sonoridades; esto lo expresó Julián Woodside, maestro y periodista cultural, al tomar parte en el panel “El otro elemento: el sonido en el cine, conceptualizar, producir y posproducir”.

“Desde los pequeños elementos de representación ya estamos construyendo empatía con el público, y entonces hay que pensar, a final de cuentas, en cuál es la audiencia, cuáles son sus códigos, cuáles sus convicciones, cuáles sus expectativas. El cine de terror, por ejemplo, no es lo mismo musicalizarlo con cuerdas o con rock pesado, a con frecuencias electrónicas”, declare Woodside. 

Dijo que a lo largo del tiempo van cambiando las estéticas, las formas del diseño sonoro y eso, al final, como parte de la construcción narrativa, permite pensar en tiempos y espacios.

“Es importante considerar que en el diseño sonoro estamos acostumbrados a narrar no sólo con palabras, no sólo con ideas, sino también mediante la suma de sonidos; tiene que ver con qué elementos agregamos, qué elementos quitamos, cómo los reconfiguramos. Una cosa bien importante de las narrativas audiovisuales es cómo se puede jugar con el sentido para no siempre representar con la misma crudeza las cosas; a veces se puede decir más con menos; a veces se pueden construir mensajes muy potentes, sin decir absolutamente nada”, añadió.

El artista sonoro César Juárez-Joyner habló de la importancia de saber escuchar, especialmente cuando se trata de hacer cine, y esta parte en ocasiones se olvida o se deja hasta el final, cuando lo ideal sería que fueran de la mano con la producción.

“A la hora de hacer cine, es lo último, la carpeta del final, y eso es horrible en muchas dimensiones; también es lo último en el presupuesto, y la cadenita sigue”, subrayó.

“Yo pienso que hay películas que suenan, y películas que no. Todo parte de la historia, y hay una interrelación. Los directores jóvenes se preguntan cómo suena su película, y eso nos va a llevar a varios temas. Es importante hablarlo desde el primer momento, porque como directores y como productores estas preguntas nos van a permitir darle forma”, precisó.

El técnico de sonido Odín Acosta compartió que está en la parte de su carrera en la que siente que puede verbalizar lo que quiere que suene, y en ese diálogo de comunicación con la directora o el director de un proyecto audiovisual llegas a un lenguaje único.

“Acompañamos desde ese lugar, que es un tanto abstracto y con el ánimo de que el diálogo siga. Tenemos que seguir aprendiendo a escuchar, porque si bien nosotros y varios colegas aquí tenemos el oído muy entrenado para lograr que esto suceda, a veces son cientos de sonidos o de capas, o de procesos”, señaló.

Carlos Cortés, ganador del Oscar en 2021 por Mejor diseño sonoro, resaltó que es vital conceptualizar el sonido, el cómo verbalizarlo hasta llegar a un consenso de alguna manera y poder materializarlo.

“A veces, también es sumamente complejo. Todavía estamos buscando un lenguaje apropiado, quizá no lo tengo tan desarrollado, pero creo que desde ahí es muy importante conceptualizar el sonido ateniéndose a las licencias o no del género, o de lo que pida el proyecto”, dijo.

La selección realizada por 34 críticos de cine de diferentes países de América Latina se inclinó por el filme alemán The Teachers’ Lounge, de Ilker Çatak, para otorgarle este nuevo premio que representa un importante esfuerzo por acercar el cine europeo al público latinoaméricano. Los otros finalistas fueron la película griega Animal, de Sofia Exarchou, y la película portuguesa Bad Living, de João Canijo. 

En conferencia de prensa con Estrella Araiza, directora general del FICG; Sonja Heinen, representante de la EFP, y el crítico Leonardo García Tsao, se explicó que este premio es una oportunidad para “abrir el abanico” del cine europeo que muchas veces no llega a México. Tal es el caso de filmes provenientes de Croacia, Bielorrusia o países del Este. 

“Para nosotros es muy importante presentar lo mejor de Europa y llevarlo fuera del continente. Por eso fue genial buscar críticos latinoamericanos que aceptaran la misión de ver los filmes, porque no estábamos interesados en decirle a Latinoamérica cuál es la mejor película que deben ver, sino que necesitábamos que ellos lo dijeran”, expresó Heinen. 

The Teachers’ Lounge explora temas universales como la educación, la ética y las relaciones humanas dentro del contexto de una escuela secundaria. La trama se centra en Carla Nowak, una joven profesora que se enfrenta a una serie de dilemas morales y profesionales en su intento por mantener la integridad y el orden en su aula cuando se sospecha que uno de sus alumnos ha cometido un robo. 

Con el propósito de incrementar la circulación y apreciación de sus propuestas fílmicas contemporáneas, la EFP, a través de este premio, promociona películas que han sido exitosas en festivales europeos como la Berlinale y Festival Internacional de Cine de Locarno. Además, cuenta con el apoyo de institutos nacionales de promoción cinematográfica, junto con el apoyo de LatAm cinema y Cineuropa. El debut de este premio supone un paso prometedor hacia el enriquecimiento del diálogo cultural entre Europa y América Latina a través del arte cinematográfico.

Más noticias

Post Views: 101