Foto: Adriana González

Más de mil 700 roedores habitan el Bioterio del Centro Universitario de Ciencias de la Salud (CUCS), donde son criados, alimentados, cuidados y atendidos en condiciones dignas para ser empleados en ensayos clínicos o investigaciones científicas.

En este espacio, recientemente remodelado, se crían ratones y ratas en entornos que procuran su bienestar; con espacios que mantienen las condiciones de temperatura, luz y ruidos ideales para evitar que el estrés afecte el desarrollo de estos animales en cautiverio.

“Los bioterios son espacios vitales para las ciencias de la salud y otras áreas, porque de aquí vamos a conseguir información vital para la salud de esos animales y también para la salud de los humanos”, declaró Dalia Madrigal Ruiz, encargada del bioterio.

Además, existen otros bioterios que pueden criar y reproducir diferentes tipos de animales, como conejos, cerdos, perros, gatos, peces, e incluso primates no humanos (como monos, simios y lemúres). Sin embargo, en el CUCS principalmente se trabaja con ratas y ratones de distintas cepas, como la C57BL/6 y la CD1.

Foto: Adriana González

“Están criados y manejados en condiciones estandarizadas de humedad, temperatura, luz y oscuridad, vibraciones y sonidos”, afirmó Madrigal Ruiz.

Estos animales reciben un cuidado singular por parte de los investigadores del CUCS, por lo que son tratados con alimento especial, filtros de aire para evitar contaminantes, e incluso se interactúa con ellos para socializar.

“En el caso de los animales de laboratorio, necesitamos conservar su salud integral. Tenemos que mantenerlos física, mental y socialmente en condiciones adecuadas”, resaltó.

Madrigal Ruiz detalló que el personal que entra a las instalaciones del bioterio también debe de seguir los protocolos de seguridad para evitar transmitir alguna enfermedad a los animales y que esto afecte su salud o los resultados de alguna investigación.

“Es muy importante que los tratemos con todo el bienestar animal; que les demos un trato ético humanitario a los animales”, enfatizó Madrigal Ruiz, veterinaria zootecnista y especialista en animales de laboratorios.

Foto: Adriana González

Históricamente, animales de laboratorio como ratas y ratones han sido fundamentales en el desarrollo de vacunas y el tratamiento de enfermedades, y desde el Bioterio del CUCS también se busca concientizar y educar a la gente sobre el trato digno que se les da a estas especies, añadió la encargada del área.

Este bioterio está regulado bajo la Norma Oficial Mexicana NOM-062-ZOO-1999, además de que existen comités de ética que vigilan que estos espacios cumplan con el trato digno a los animales y se apeguen a objetivos científicos como investigación, pruebas de laboratorio y enseñanza.

“Todo el tiempo están vigilando, y se debe de vigilar que haya bienestar animal y se trate humanitaria y éticamente a los animales; primero por ellos y después por el resultado de la investigación, que queremos que sea de la más alta calidad”, sostuvo.

Bajo los cuidados del bioterio, estos animales pueden llevar una vida digna en cautiverio, viviendo hasta dos años en el caso de ratones, y entre tres y cuatro años para las ratas.

Artículo anteriorAsesoran en materia de salud sexual y reproductiva