Fotografía: Abraham Aréchiga

El fenómeno meteorológico de “El Niño”, aunado a la formación de un sistema anticiclónico, propiciarán altas temperaturas en Jalisco y poca lluvia durante el fin de septiembre y principios de octubre, afirmó Mauricio López Reyes, investigador del Instituto de Astronomía y Meteorología (IAM), del Centro Universitario de Ciencias Exactas e Ingenierías (CUCEI).   

López Reyes explicó que, por una parte, “El Niño” se está consolidando en aguas del Pacífico ecuatorial y, de acuerdo con los pronósticos, se intensificará en los próximos meses y tendrá su pico máximo entre diciembre y enero, lo que implica mucha variabilidad climática en el Centro Occidente de México en cuanto al temporal, con lluvias muy irregulares.

Por otra parte, y asociado con este fenómeno, se tiene registro de la formación de un sistema anticiclónico ubicado a cinco kilómetros de altura de la atmósfera, que es una especie de escudo natural contra la humedad que forma una masa de aire seca; al no tener humedad suficiente inhibe el potencial para formar nubes y, por ende, al no haber esa cobertura nubosa, hay más radiación solar y las temperaturas son más altas.

“Estos fenómenos inducen la variabilidad climática y se han combinado para darnos un temporal de lluvias muy seco, por debajo de lo normal. Al tener menos cobertura nubosa, hay temperaturas más altas”, especificó López Reyes.

Fotografía: Abraham Aréchiga

Recordó que la temporada de lluvia concluye alrededor del 15 de octubre, aunque con la presencia de “El Niño” esta estadística es más irregular. Ante ello, los pronósticos indican que el 27 y 29 de septiembre serían días secos, mientras que del 30 de septiembre a los primos días de octubre podría haber chubascos y tormentas eléctricas irregulares, similares a las que ocurrieron durante agosto y principios de septiembre.  

Aseguró que septiembre ha sido uno de los más cálidos dentro del registro histórico de temperatura con entre 2 y 3 grados por encima de lo normal, muy parecido a lo que ocurrió en junio de este año.

Con base en los registros hasta el 25 de septiembre, tomados de las estaciones meteorológicas de la Unidad Estatal de Protección Civil y Bomberos, así como del Servicio Meteorológico Nacional y en otras propiedad del sector privado, las y los especialistas del IAM han determinado que las precipitaciones pluviales han sido entre 10 y 50 por ciento menores que el promedio anual, variando por regiones. 

Fotografía: Abraham Aréchiga

Las zonas más afectadas son Altos Norte, Norte, Altos Sur y Ciénega con entre 30 a 50 por ciento menos lluvia de lo normal, que se traduce en 250 y 500 milímetros cúbicos en promedio por abajo de lo normal; el Centro de la entidad, que incluye la región Valles y el Área Metropolitana de Guadalajara, estuvieron ligeramente por debajo de lo normal, con entre 10 y 15 por ciento menos lluvia, equivalente a 100 milímetros cúbicos por debajo de lo normal.

En las zonas Sur, Lagunas y el área montañosa el déficit de lluvia fue de 20 a 30 por ciento, lo que se traduce entre 200 y 300 milímetros cúbicos menos de precipitación; en tanto, las zonas de la Costa Sur y Norte tienen déficit de 10 a 30 por ciento menos lluvia de lo normal, que es aproximadamente 200 y 400 milímetros cúbicos.

PARA SABER

El especialista pidió a la ciudadanía y a las autoridades no bajar la guardia porque aún podría haber tormentas eléctricas con granizo, rachas de viento intensas y grandes acumulados de precipitación que afectarían a las poblaciones más vulnerables, más aún en un escenario de deforestación y cambio de uso de suelo que han propiciado afluentes de agua más agresivos.

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