De espaldas a la sociedad

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Vivimos en una sociedad dividida. El capitalismo en el que estamos insertos genera un proceso de exclusión que da como resultado dos grupos: el de los excluidos (la gente que padece hambre) y el de los exclusivos (los que tienen el poder económico, político, ideológico y cultural). Entre estos dos no hay una relación de diálogo ni de democracia, sino una dinámica de manipulación de los exclusivos hacia los excluidos.
El profesor investigador de la cultura regional en la UdeG, Francisco Salinas Paz, precisó que no es que haya una división entre católicos y críticos por el asunto de la donación de 90 millones de pesos al Santuario, pues los mismos católicos son muy heterogéneos y hay quien critica, “pero como no tienen voz ni voto, son grupos muy soterrados, muy subalternos que poco ejercen de su poder”.
Por su parte, el doctor Rogelio Luna Zamora, jefe del Departamento de Sociología del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades, advirtió que la sociedad expresó su descontento lanzándose a las calles a manifestarse, pero de ninguna manera es de esperar una revolución. “Emilio está pagando el precio, pero tampoco pasará a mayores. Si bien es cierto que la violencia genera más violencia, que metió la pata y se portó muy vulgar, lo claro es que estaba comprando votos. El problema es que apoya a una iglesia y no a otra y, por supuesto, que hay un enorme malestar por esa discriminación”.
De igual forma, el maestro Víctor Ramos, del Departamento de Estudios Políticos, aseveró que Emilio González pensó cautivar a los creyentes católicos y a los empresarios. Y lo que puso sobre la mesa es que hay una franja de católicos dividida: “Él intentó abrirle los ojos a mucha gente, probablemente de manera práctica hizo un cálculo equivocado”.

Me saludas a la tuya
El gobernador se mostró incongruente y absurdo al mentar la madre, “por decir lo menos de un personaje que se dice democrático y soberano”. El profesor Salinas Paz, admitió que da la tentación de caer en su mismo nivel de discurso y empezar a lanzar improperios, por lo que no le pareció extraño ver que la gente lo tomara a chiste y se vendieran en el tianguis cultural algunas camisetas con la imagen del gobernador con leyendas como “Me saludas a la tuya”. De manera tradicional siempre ironizamos nuestras propias desgracias, señaló.
Subrayó que a nivel de hipótesis, el discurso político siempre es estratégico, nunca un discurso honesto. Y recordó que fue el mismo personaje quien mostró su discurso: “Si públicamente dijo eso, ¿te podrás imaginar el concepto en el que tiene a sus interlocutores? ¿De qué manera habla de la gente?, ¿la considera digna de diálogo o de una mesa de interlocución? Yo creo que más bien le apuesta a la incapacidad de la gente de reaccionar ante ese tipo de acciones y al menosprecio que tiene de sus interlocutores. No los considera dignos de ser sus adversarios”.
La expresión del gobernador fue tan violenta que la gente reaccionó de la misma forma. Así lo interpretó el sociólogo Rogelio Luna, y si el malestar crece, “es de esperar que a la hora de las próximas elecciones la gente se la cobre a él y a su partido”.
De la actuación de los diputados federales que subieron el tema a la Cámara, consideró que el gobernador viola la ley y la Constitución, lo que amerita una demanda jurídica. “Ojalá que lo frenen y no regale dinero a lo tonto”.

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