Sin que hasta ahora el gobierno federal haga en realidad lo propio, lo que corresponde a todo gobierno que lo sea en verdad, en donde la justicia realmente se lleve a cabalidad en toda su extensión, lo que observamos los mexicanos es que para los gobiernos, los partidos, los políticos y para las cámaras de diputados y a sus diputados, poco le importa la vida de las personas. Lo que a todos les importa, en la vida política, es lo que puedan hurtar y llevar agua a su molino cuando de votos se trata. Si los tarahumaras representaran votos para los candidatos de las próximas elecciones en todo el país, ya se hubieran al menos pronunciado a favor de la gente, de los seres humanos, de los tarahumaras que se mueren de hambre en la sierra. Poco se ha apoyado en realidad a estos hermanos, poco se hará con toda seguridad… o quizás pronto signifiquen votos esas vidas ya veremos a los políticos hablando de esta etnia milenaria con una hambre milenaria, con una muerte cerca y sin que Felipe Calderón se acuerde de ellos, ahora que en Europa lo declaran “un líder”, qué ironía, qué burla…