Fotografía: Iván Lara González

La tiradera se puso buena en la Preparatoria 5. Decenas de raperos emergentes traficaron rimas al por mayor, para demostrar que la victoria se gana teniendo un gran manejo de la palabra, acompañado de sonidos del hip hop.

En el auditorio de dicha prepa hubo explosiones de aplausos, ovaciones y abucheos. Todo ese alboroto tenía el poder de respaldar o incluso humillar a quien, por segundos, tenía en su poder el micrófono; sus propios versos podían llevarlo a la gloria o hundirlos en la humillación.

“A pesar de todo estamos aquí parados y dimos nuestro mejor nivel. El problema es que yo estoy dando el 50 y me estoy llevando al 100”, dijo el rapero “Ghidan” (@jonathann.wav), tras una bulla de doble filo.

Fotografía: Iván Lara González

“Ten cuidado, que el sobreesfuerzo te puede llegar a joder después. Por impresionar a más personas no hagas que tu misma persona ya no se sienta bien. Yo vine aquí para rapear y para ganarme un puesto, que triste que tú llegaste a la final solamente ara ganarte mi respeto”, remató “Balam” (@bil_balam).

Los ánimos estaban incontrolables por parte del público animado por el blogger y rapero ESEK (@suciodan_gdl). Era el último round, a pura capela, ya sin beats musicales ambos jóvenes finalistas no se cansaban de picar crestas; el ganador, tras decisión unánime del jurado se lo llevó “Balam”.

Todo esto ocurrió en el segundo día del Concurso de Freestyle que organiza la Federación Estudiantil Universitaria (FEU) y Origen Freestyle, con el que se busca impulsar la cultura urbana mediante batallas de rap, por parte de nuevos talentos estudiantes de bachillerato o licenciaturas de la Universidad de Guadalajara (UdeG).

Fotografía: Iván Lara González

“Tengo tres años haciendo freestyle. En esto tienes todo en el momento: debes formular una respuesta, sabes quién es tu rival y está la parte del respeto, pero tienes que estar concentrado si es que quieres ganar. Hoy gané y fue un gran logro porque me ha costado trabajo, ver que ya no tengo nervio y verme bien parado es un gran logro para mí”, dijo “Balam”, cuyo nombre real es Diego Alberto Garcia Salazar, estudiante de Psicología del Centro Universitario de Ciencias de la Salud (CUCS).

“Ya tenía fechas batallando y pues me animé. Yo inicié en la secundaria, yo era espectador y la curiosidad me llevó a rapear con los compañeros, y a seguir practicando. Esta es la primera vez que me siento tan motivado al escuchar los gritos de la gente, me sentí vivo; gané experiencia y confiar en mí”, añadió el subcampeón de la tarde, “Ghidán”, quien en realidad se llama Jonathan Castellanos y estudia el primer semestre en la Preparatoria 11.

Fotografía: Iván Lara González

La Presidenta de la FEU, Zoé García, calificó este encuentro como “un momento muy importante para el freestyle en nuestra Universidad. Ya había habido muchos que buscaban posicionarlo como una manera de expresarse y tener espacios; hoy es una realidad con una liga que llegarán a todas las regiones del estado”.

“Estábamos temerosos de que no tuviera buena respuesta, pero fue todo lo contrario, los chavos estaban súper interesados e incluso hubo momentos en los que dábamos descanso y nadie se salía del auditorio porque todos querían ver qué estaba pasando”, expresó.

Aquí encontrarás más información sobre el concurso.

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