¿Qué es la ciencia?

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No siempre es fácil definir lo que uno hace. Así sucede con la ciencia, quizá porque es una actividad cuyos objetos de estudios son absolutamente todos los objetos que existen y que se producen en la naturaleza.
Los científicos se esfuerzan por tener las respuestas a: ¿De qué están hechos los cuerpos que vemos (incluidos los nuestros)?, ¿cómo funcionan y cuáles son los mecanismos mediante los que surgen y se reproducen los seres vivos?, ¿por qué brillan las estrellas?, ¿cuáles son las causas de las mareas y de los terremotos?, ¿por qué el cielo que vemos durante el día es azul y no amarillo?, y ¿cómo explicar los colores?
Se habla también de las ciencias sociales o ciencias humanas, que se integran con disciplinas como la economía, la historia o el derecho. La índole de sus objetos de estudio es demasiado compleja. Son materias que no poseen la capacidad de predicción que tienen las ciencias de la naturaleza, como la física, química o la biología y la “capacidad de predecir”, característica esencial, central de la ciencia.
El mínimo imprescindible que debe poseer una teoría para que se pueda afirmar de la misma de que es científica, radica en la capacidad de predecir y que esas predicciones se puedan comparar con lo que realmente observamos, y por supuesto, que una buena parte de esas predicciones sean ciertas.
Las teorías científicas realmente poderosas nos ayudan a encontrar hechos que se dan en la naturaleza y que antes de ese encuentro ni siquiera imaginábamos que pudieran existir. Estas reflexiones nos aclaran que para ser científico es preciso una buena dosis de paciencia, de persistencia, de imaginación y de inteligencia, pero ¿qué es la inteligencia?
No hay unificación de criterios en su definición, pero la favorita de ese gran historiador de la ciencia que es el doctor José Manuel Sánchez Ron es: “La inteligencia es una aptitud mental muy general que implica, entre otras cosas, la capacidad de razonar, prever, resolver problemas, pensar en abstracto, captar ideas complejas, aprender y aprovechar las enseñanzas que nos da la experiencia”.
¿Quién no posee en algún grado estas características? No hace falta ser un Einstein o un Newton para ser científico ni para hacerse una idea de qué es la ciencia y familiarizarse con sus principales resultados.

Algunas reflexiones de científicos
La tierra tiene 4 mil 500 millones de años de existencia. Es mucho, pero comparado con los 13 mil 500 millones de años del universo, la tierra es joven. Por ello consideran que le queda una larga vida por delante y se calcula que su final llegará dentro de 7 mil 500 millones de años, cuando el sol agote su hidrógeno, transformándose en una estrella (¿) gigante y roja tan grande y caliente que alcanzará la órbita terrestre antes de acabar con todo rastro de vida en la tierra.
Quizá otros mil millones de años después haga explosión lo que conocemos como Vía Láctea, junto a Andrómeda. Esas cantidades de años parecen estratosféricas comparadas con los –hasta ahora probados– 200 mil años de los homo sapiens.
El planeta es muy resistente y posiblemente existirá hasta su holocausto final, con el sol, pero los humanos que lo habitamos y hemos podido crecer, desarrollarnos y reproducirnos gracias a su flora, fauna, agua y aire abundantes y limpios, no tenemos la certeza de que sobreviviremos a los cambios climáticos.
Cito algunos aspectos a los que se dedicará la ciencia en el futuro: a la dificultad de cuantificar el movimiento de las corrientes profundas o la emisión directa o indirecta del calor desde la superficie del mar. Ni siquiera conocemos la capacidad de los mares para absorber dióxido de carbono, el veneno para nuestro aparato respiratorio.
Tampoco entendemos bien cuál es la magnitud de la energía que intercambian las aguas en la superficie del planeta con las aguas profundas. Tampoco la energía que intercambia la atmósfera con la tierra.
Lo que sabemos siempre ha sido menos que lo que no sabemos. Por ello es irremediable que estemos atentos a los descubrimientos y nuevos conocimientos que de la ciencia se derivan. [

* Unidad de Vinculación y Difusión

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