La muerte del autor de la Visión de los vencidos

1125

Los mexicanos pierden a un gran historiador, una de las autoridades más reconocidas en el pensamiento y literatura náhuatl; un académico que compartió el conocimiento universal y comprometido con las raíces de México. Se trata de Miguel León-Portilla, a quien la Universidad de Guadalajara le otorgó el título de Doctor Honoris causa en 2010 por sus aportaciones en historia, antropología, filosofía y filología en México y el mundo.

En 2008, el Centro Universitario del Norte (CUNorte) le entregó el Premio Tenamaztle, en el marco del III Encuentro de Especialistas de la zona Norte de Jalisco y Sur de Zacatecas. En 1995, León Portilla escribió un libro en el que realiza una amplia biografía de Francisco Tenamaztle, Señor de Nochistlán, quien encabezó la principal resistencia que encontraron los españoles durante la conquista de México.

El autor de la Visión de los vencidos. Relaciones indígenas de la conquista, tuvo una relación permanente con esta Casa de Estudio, al ser invitado especial en diversas conferencias, entre ellas la Cátedra Latinoamericana Julio Cortázar y la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL).

En la FIL de 2016, durante la presentación de las versiones en náhuatl y chino de su libro Visión de los vencidos. Relaciones indígenas de la conquista, destacó que para los mexicanos “el mundo indígena significa mucho. Alguien diría, ‘pero si no piensan nunca en los indios flojos’; los indios, a pesar de que los despreciamos muchas veces, y a pesar de que hay mucha discriminación, tienen una gran presencia en México”. Y añadió: “México no es como Estados Unidos, un mero trasplante de gentes; México es mucho más, es una serie de injertos sobre una matriz, que es la matriz indígena”.

La publicación tiene un tonalli, es decir, “un destino”, dijo en 2016 en el Salón Juan José Arreola de la Expo Guadalajara. “Ahí está un libro que siempre tiene que estar vivo en náhuatl, eso es lo que quiero decirles”.

Como historiador, escritor, antropólogo, filólogo y filósofo, centró su interés en los pueblos del México prehispánico. Su vasta obra recoge y estudia las creencias, las tradiciones y el pensamiento de estas culturas.

Logró reconocimiento a través de la traducción, interpretación y publicación de la literatura náhuatl. Encabezó un movimiento para entender y revaluar esta literatura, no sólo en la era precolombina, sino también la actual, ya que el náhuatl sigue siendo la lengua materna de 1.5 millones de personas.

Contribuyó a establecer la educación bilingüe rural en México y a descubrir las obras de Fray Bernardino de Sahagún, fuente primaria sobre la cultura mexica y a quien declaró primer antropólogo de los nahuas. Antes de León-Portilla, el Códice Florentino, obra original de Sahagún sobre las cosas de la Nueva España, había sido traducida una sola vez (al alemán), y aún esa versión era incompleta.

Recibió los doctorados Honoris causa por las siguientes universidades: Southern Methodist University, Texas; Universidad de Tel Aviv; Universidad Toulouse Le Mirail, Francia; Universidad Mayor de San Andrés, Bolivia; Brown University, Rhode Island; Universidad Carolina de Praga; San Diego State University; Pontificia Universidad Católica de Perú; así como de las universidades mexicanas: Autónoma de California; de Colima; Autónoma de México; Iberoamericana de México; Autónoma del Estado de Hidalgo y Autónoma Metropolitana.

Entre los premios y reconocimientos destacan: Elías Sourasky, Commendatore por la República Italiana; Premio del Consejo de la Costa del Pacífico en Estudios Latinoamericanos; al Mérito Indigenista (México); Aztlán (Nayarit); Medalla Belisario Domínguez (México); Internacional Alfonso Reyes; Bartolomé de las Casas (España); e Internacional Menéndez Pelayo (Universidad de Santander, España).

Artículo anteriorCurso Informativo Semestre Base
Artículo siguientePrograma Especial de Promoción para el Personal Administrativo