Evaluación del desarrollo curricular en el CUCS

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En el mundo actual cualquier persona que disponga de una computadora tiene la posibilidad de acceder de manera infinita a información de muy diversa naturaleza. La capacidad para generar conocimiento ha crecido y con ello también la necesidad de aprovecharlo y aplicarlo. Este se renueva, se pondera y se acumula con suma rapidez de tal suerte que la posibilidad para incorporarlo a la vida cotidiana queda rebasada en poco tiempo. Vivimos en una sociedad del conocimiento y esto impacta de manera compleja en todos los ámbitos de vida social.
Los procesos educativos enfrentan ante estas condiciones un reto importante: asumir estrategias que permitan no sólo dar cuenta de los nuevos conocimientos, sino también analizarlos, evaluarlos ponderarlos y por supuesto traducirlos en saberes indispensables para resolver problemas o realizar intervenciones que redunden en mejores condiciones de vida de las personas y los grupos.
Un proceso educativo que parte de las necesidades que le plantea el contexto, es un proceso socialmente pertinente y las instituciones educativas deben responder anticipadamente a esos requerimientos. Desde esta óptica se vuelve indispensable revisar cómo y bajo qué perspectiva las instituciones de educación superior están cumpliendo el cometido de formar técnicos y profesionales competentes para responder a las necesidades sociales.
Una manera de hacerlo es poner en marcha procesos de evaluación que den cuenta de las condiciones en las que se lleva a cabo el proceso educativo. Evaluar, se vuelve así un ejercicio imprescindible y una acción necesaria y permanente en la vida de una institución educativa que busca responder con pertinencia y oportunidad a los requerimientos que le plantea la sociedad.
Evaluar es también un ejercicio de reflexión crítica a través del cual la institución y los actores del proceso educativo determinan si la manera de formar cumple o no con las expectativas del sujeto, de la institución y del mundo sociolaboral.
Es un ejercicio necesario ante la compleja tarea de formar personas capaces no sólo de resolver problemas propios de un ámbito o campo profesional, sino también competentes para la vida; ejercicio a través del cual se plantea valorar la experiencia generada en la implementación de una propuesta educativa por Competencias Profesionales Integradas (CPI) y evaluar su impacto desde la mira de las exigencias de una sociedad presente y futura. Por ello, resulta fundamental disponer de información precisa, oportuna y pertinente para identificar problemas, debilidades y fortalezas desde las que se actualicen los programas educativos (PE) a fin de mantener su vigencia y pertinencia social y profesional.
Así, el propósito del Programa de Desarrollo Curricular (PDC) del Centro Universitario de Ciencias de la Salud (CUCS) de la Universidad de Guadalajara, es valorar la implementación del modelo curricular por CPI y las dinámicas de los procesos educativos y organizacionales del CUCS, con relación a las necesidades y demandas de formación de los profesionales de la salud, en el contexto de las políticas y estrategias institucionales, regionales, nacionales e internacionales.
En este Programa, se reconoce a la educación como un fenómeno complejo y a la evaluación de los procesos educativos como una acción parcial y de poca utilidad si no es una práctica que incluya las diversas visiones de los actores que den cuenta de esa complejidad. En este Centro Universitario la evaluación del desarrollo curricular se concibe como un macroproyecto de investigación educativa, en el que a través de una metodología participativa, se encuentran hoy involucrados numerosos equipos de trabajo realizando diversas acciones de evaluación diagnóstica alrededor de dimensiones de análisis previamente identificadas en torno al ámbito curricular: las más de 80 academias de los 19 departamentos, las tres divisiones, las coordinaciones de los doce programas de pregrado en sus diferentes niveles y modalidades, junto con sus Comités Consultivos Curriculares (CCC) correspondientes.
También se han integrado trece Equipos Técnicos de Apoyo (ETAs), cuyo trabajo se concretará en la elaboración de igual número de documentos que serán insumos que apoyarán el quehacer de los CCC; de igual forma, en diferentes niveles participan las coordinaciones de área y unidades académicas y administrativas. Un Comité Técnico es el responsable de construir la propuesta, coordinar y dar seguimiento a su implementación.
En breve se reforzarán estrategias que inviten a una amplia participación de la comunidad del Centro Universitario, interesa en especial, dar la palabra a los sujetos centrales del proceso educativo, los estudiantes, futuros profesionales de la salud. Una de las estrategias para fomentar esta participación se encuentra en la página Web del CUCS en el que se puede acceder a un Foro, así como a una serie de documentos base del PDC y a otros de apoyo para los diversos grupos y tareas que en este momento se desarrollan.
Por lo anterior, se denomina al 2008 como el “Año de la Evaluación del Desarrollo Curricular” y se espera al final del año, contar con elementos que permitan tomar decisiones fundamentadas en materia de diseño y rediseño, actualización y mejora de los planes y programas de estudio así como de los procesos de formación de recursos humanos para la atención a la salud.

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