Con Mesa de Salud, CUTonalá atiende a ladrilleros de Tlaquepaque

Con una estrategia en materia de salud, se han atendido a ladrilleros de Tlajomulco de Zúñiga, Tonalá y Tlaquepaque. la próxima semana atenderá a productores de El Salto 

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Fotografía: Abraham Aréchiga

La Mesa de Salud del Centro Universitario de Tonalá (CUTonalá), un proyecto incluido en la estrategia “Jalisco Respira” del gobierno estatal para disminuir la contaminación en la entidad, atendió este viernes a productores de ladrillo del municipio de Tlaquepaque que se han visto afectados en su salud por la actividad que desarrollan.

La brigada, integrada por 20 estudiantes de quinto semestre y pasantes de la carrera de Médico Cirujano y Partero del CUTonalá de la UdeG, llegó a la colonia Valle de la Misericordia, en Tlaquepaque, este viernes 20 de mayo, donde atendieron a la comunidad ladrillera.

El profesor investigador del CUTonalá, Luis Daniel Hernández Ortega y coordinador de la Mesa de Salud, explicó la actividad desarrollada con el esfuerzo universitario del Departamento de Ciencias de la Salud-Enfermedad como Proceso Individual y de la Carrera en Médico Cirujano y Partero del plantel.

“Los pasantes y alumnos hacen la toma de glucosa, presión arterial, peso y talla, y una historia clínica lo más completa posible, enfocada en su actividad primaria desempeñada –la producción de ladrillos–, en busca de detectar problemas pulmonares, de piel, oculares y alteraciones metabólicas”, explicó.

Fotografía: Abraham Aréchiga

El trabajo incluye la toma de muestras sanguíneas para descartar trastornos metabólicos; y también para tratarlas con la técnica de micronúcleos para averiguar si, debido a la actividad de los trabajadores del ladrillo, existe un daño genético.

“Con los resultados que obtengamos, en la Mesa de Salud podremos generar propuestas de integración en la zona y traer proyectos de intervención social para involucrar al área de médico cirujano y partero, para la intervención de especialistas de pulmón con espirometrías y de nutrición”, informó.

Se prevé que los proyectos incluyan la participación del área académica de economía para la impartición de cursos y talleres de artesanías y empujar la transición al cambio de actividad productiva, la producción de ladrillos con gas natural y no con madera o basura, y la conformación de parques ladrilleros alejados de zonas urbanas.

“Aquí no podemos utilizar un modelo restrictivo debido a que es la principal actividad económica de estas personas, la manera  de sostenerse y no podemos decirles ‘no quemen’, porque se compromete el ingreso económico”, dijo el profesor investigador del CUTonalá.

Fotografía: Abraham Aréchiga

Un ladrillero de la colonia Valle de la Misericordia, Enrique Ríos Reyes, se dedica al oficio desde hace décadas. “Yo llevo toda mi vida trabajando en los ladrillos, y ya tengo 62 años. Todos los días llego a las seis de la mañana y me voy a las cinco de la tarde”, compartió.

Contó que su trabajo es físicamente exigente y con riesgos para su salud. Al trabajar descalzo, se ha herido con clavos y piedras mezclados en el barro que apisona con sus pies.

El ladrillero y representante de los productores de la colonia, Juan Manuel Bogarín González, aseguró que hay un acuerdo de colaboración con las autoridades estatales y con la Universidad para ayudar en la regulación de la quema del ladrillo y su atención médica.

La integrante de la Mesa de Salud, estudiante en Médico Cirujano y Partero del CUTonalá, Iris López Ortiz, dijo que la atención a los ladrilleros se basa en la aplicación de los conocimientos básicos, aunque para ella lo más valioso es saber y aprender cómo relacionarse con los pacientes.

“Esto me ayuda para aprender y conocer cómo es el contexto de las personas más allá de lo que atendemos, y creo que requieren una atención primaria, ya que los servicios de salud les quedan lejos», dijo la estudiante.

Fotografía: Abraham Aréchiga

La Mesa de Salud ya ofreció servicios en las ladrilleras de Tlajomulco; en la colonia La Ladrillera de Tonalá y la delegación municipal de Coyula, de Tonalá; en la colonia Parques de la Victoria de Tlaquepaque, y la próxima semana en el municipio de El Salto. El doctor Hernández Ortega estima que en los tres municipios visitados hay un promedio de 750 ladrilleros en cada uno.

El proyecto “Jalisco Respira” lo coordina la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial (Semadet), por medio de la Dirección de Gestión de la Calidad del Aire.

En la Mesa de Salud participa la Dirección de Ecología, el DIF municipal y el Instituto de Formación para el Trabajo (Ideft); este último ofrece alternativas laborales a través de la  capacitación e inclusión laboral con cursos de carpintería, reparación de celulares, de computación, entre otros.

En las actividades se instaló una mesa de encuesta donde se registran los materiales usados: arcillas, agua y combustibles.

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