A partir del pasado jueves 31 de octubre, en Jalisco existe una nueva figura jurídica que reconoce los diferentes tipos de convivencia que hay en la entidad, pero que no estaban regulados por el ordenamiento jurídico. En sesión extraordinaria el pleno del Congreso del Estado aprobó por mayoría de votos la Ley de Libre Convivencia para el Estado de Jalisco. Al día siguiente, el gobernador Aristóteles Sandoval promulgó el decreto, que entrará en vigor el primero de enero del próximo año.
En opinión de la maestra Norma Angélica Olvera Estrada, académica de derecho familiar y derecho sucesorio, del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH), la ley permitirá construir una sociedad más igualitaria.
“Es un avance en materia de derechos humanos porque los homosexuales son personas igual que nosotros. Lo más importante es que no deberán levantar un acta del registro civil sino un contrato ante notario público. En general, preveo una disminución en la discriminación, creo que esta ley tendrá este efecto, por lo que es un avance para conformar una sociedad más igualitaria”.
Los 20 diputados que apoyaban la propuesta enlistaron una serie de beneficios que arrojará el reconocer a otros tipos de familia. Por ejemplo, indicaron que generará igualdad y ampliará los derechos humanos de todos los habitantes de Jalisco, ya que podrán gozar de los derechos sucesorios, de alimentos y seguridad social, y tendrán certeza jurídica al poder reclamar beneficios derivados de pensiones y prestaciones sociales. Por parte de quienes votaron en contra, entre sus razones señalaron que la propuesta carecía de sentido y que nada aportaba a la seguridad jurídica de las distintas formas de convivencia que existen, pero que no son reconocidas.
Como en el Congreso del Estado, en diversas conferencias y debates se han mostrado las opiniones tan diversas de quienes se muestran a favor y en contra de esta ley, la cual se había previsto que sería votada antes de que finalizara este año. Finalmente, los legisladores definieron que el acto jurídico quedará constituido cuando dos o más personas de diferente o mismo sexo, mayores de edad y con capacidad jurídica, establecen un hogar común con voluntad de permanencia y ayuda mutua.
La especialista de la Universidad de Guadalajara añadió que existen muchos modelos de convivencia en los que una de las partes tiene una desventaja. “Familias sui géneris de ayuda mutua en la que una de las partes no trabaja para cuidar a los más pequeños y la otra provee las necesidades del hogar. La que no trabaja queda completamente desprotegida, no tiene acceso a servicios médicos y en caso de que la persona que trabaja fallezca, el estado económico será más deplorable. Esta ley, aparentemente viene a modificar estas problemáticas, ya que aplica para personas que tienen o no alguna relación amorosa”.
La ley recién creada establece que para concretar la libre convivencia se deberá realizar ante un notario público el trámite correspondiente, el cual implica proporcionar los datos personales de los celebrantes, así como especificar que no tienen impedimento legal para hacerlo. La relación económica patrimonial se regirá por la separación de bienes prevista en el Código Civil del Estado de Jalisco.
Ampliar las prestaciones que el trabajador tiene a los libres convivientes y ofrecerles seguridad patrimonial al otorgarles acceso al Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit), son otras cuestiones en las que deben legislarse, opinó la docente del CUCSH.
“Tenemos que ir paso a paso porque esto incide incluso en la opinión de los distintos sectores. Aunque no va dirigido de manera exclusiva a las personas homosexuales, es una nueva etapa a nivel mundial a la que nos estamos adaptando al mostrar este avance en Jalisco, un estado que se ha considerado muy conservador. Las leyes no son perfectas sino perfectibles. Hace falta mucho por hacer para igualar los derechos de las personas pero este es un gran paso”.
Cabe mencionar que el 16 de noviembre del 2006 se publicó el Decreto de Ley de Sociedades de Libre Convivencia en el Distrito Federal, hecho trascendental en el tema. Además, el 10 de diciembre de 1948 nació la Declaración Universal de los Derechos Humanos, la cual desde entonces habla de la igualdad social ante la ley de todos los seres humanos, lo que para Olvera Estrada “es la fuente inicial de leyes como la de Libre Convivencia para el Estado de Jalisco”.
