Todos los jaliscienses hemos formado parte de la trama de la telenovela del transporte público. Recientemente el gobierno estatal anunció que no subirá hasta que el servicio mejore. Y acompañado de esta noticia, se anuncia el llamado “reacomodo de rutas” del cual la base será el sistema de tren eléctrico urbano (incluyendo la línea 3 próxima a construirse), además del macrobús.
Opino que parte de ese reacomodo deberá basarse en desahogo el centro de Guadalajara. En lo que va del año por lo menos ha habido 5 accidentes en esta área, sin mencionar el tráfico que se genera por la gran cantidad de camiones que circulan por ahí, puedo afirmar que el centro esta a punto de colapsar en cuanto a movilidad.
En cuanto al tren, al parecer la ruta que se va a elegir es la diagonal de Zapopan hacia Tlaquepaque. Muchos comentan que la línea que se necesita es la de Tlajomulco la cual se había anunciado el sexenio pasado; supongo que lo más fiable es beneficiar al mayor número de personas posible y en eso deberán basar la decisión.
La labor que realizaron diversas organizaciones civiles y políticas fue el detonante de lo que podríamos llamar “Reforma al Transporte Público en Jalisco”.