Conforme las tormentas en la Zona Metropolitana de Guadalajara son más frecuentes y devastadoras, quienes transitamos por las calles y avenidas, miramos el abandono en el que se encuentran las ciudades de esta parte del mundo. Parecen, como se dice en todas partes, espacios bombardeados.
Parece, pues, que no vamos por una calle o avenida de por aquí, sino que nuestros pobres autos atraviesan lugares donde las guerras (lamentablemente) han dejado profundas huellas en la tierra.
Estamos pues, abandonados por los gobiernos priistas, y mceistas. Ambos son un asco. Asco.