La Universidad de Guadalajara continúa siendo el epicentro del conocimiento en el Occidente del país. Así lo ratificó el ranking anual del periódico El Economista al ubicar a la Universidad de Guadalajara en el primer lugar en esta zona del país, lo que me es grato saber.
La calidad dentro de nuestra universidad no es casual: es causal. Me explico: hoy contamos con 765 profesores en el Sistema Nacional de Investigadores (SNI), que simbolizan calidad y prestigio sobre las contribuciones científicas. Una universidad que apuesta a la ciencia y a la tecnología no solamente es sinónimo de calidad, sino también una universidad preparada para los retos futuros.
Hoy la Universidad de Guadalajara es la institución educativa pública con el mayor número de posgrados reconocidos por el Conacyt (Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología), por encima de la UNAM, la UANL y el Politécnico.
Quienes cursan un posgrado dentro de esta Casa de Estudio tienen la certeza de que obtendrán un conocimiento de calidad, que se convertirá en mejores condiciones salariales y eventualmente en mejor calidad de vida, conocimiento que también mejora la calidad de su comunidad.
A lo largo y ancho del estado de Jalisco la Universidad de Guadalajara se hace presente a través de su Red, llevando el conocimiento a los jaliscienses en todas sus latitudes. Hoy los jóvenes tienen la oportunidad de no abandonar sus comunidades, de adquirir conocimiento y generar mejores condiciones en su lugar de nacimiento. El conocimiento debe ser expansivo y no concentrado.
La Universidad de Guadalajara hoy más que nunca está comprometida a ser parte de la vida social del estado y jugar un papel fundamental en la transformación de la sociedad. Un rol para la modernización y democratización de la sociedad. El futuro de Jalisco es también el futuro de la educación.
