Neil Young es un músico que no necesita demostrar nada. Las diferentes etapas que componen su trayectoria, son una prueba de que Young está más allá del bien y el mal. En este nuevo capítulo, el rock puro y el inseparable toque country, abrigan a una serie de canciones en las que sobresalen la experiencia y el discurso de una figura que continúa como referente para distintas generaciones. “Walk like a giant”, un tema de larga duración, concentra la esencia de este álbum.