Seis obras componen el nuevo material de Israel Martínez, trabajos que han sido hilados sin pausa, realizando un ejercicio de procesamiento y fusión entre fuentes concretas –grabaciones de campo y paisaje sonoro–, sonidos electrónicos que se generan a través de sintetizadores analógico-digitales y computadora. El resultado es intenso, de música compleja y casi visual.
El hombre que se sofoca, título de esta producción, toma como referencia el libro Punks de boutique, del escritor francés Camille de Toledo, un ensayo que, entre otros temas, aborda las incongruencias de la contracultura en un contexto moderno, mismo que Israel Martínez interpreta como “la gran frustración que genera la impotencia de no poder cambiar nada en términos socio-políticos”.
En el disco pueden escucharse grabaciones en parques solitarios, juegos infantiles en desuso, playas abandonadas, lugares que en antiguamente fueron vacacionales o de recreación y que actualmente se encuentran solitarios. Todo bajo un minucioso procesamiento que caracteriza a Israel Martínez desde su trabajo Mi vida (2006), con el que recibió el Premio de Distinción en el Prix Ars Electronica 2007.
El hombre que se sofoca es distribuido a nivel mundial por Sub Rosa, uno de los sellos con mayor proyección dentro de la música experimental, y archivo de obras de arte sonoro. Ha publicado trabajos de artistas como John Cage, Sonic Youth o Merzbow.
