El cine congelado

1286

José María Prado invita a conocer la intimidad de personalidades del cine estadounidense y español. El director de la Filmoteca Nacional de España los retrata sin pose de pasarela ni maquillaje.

El Festival Internacional de Cine en Guadalajara presenta la exposición Chema Prado / Series. En ella, Prado muestra imágenes capturadas en décadas anteriores en lo que parecen situaciones detrás de cámara, acaso de momentos de reposo, en los que actores como John Malkovich o Javier Bardem se alejan de todo intento por mantener la imagen que los constituye como celebridades; se les nota muy anclados a tierra, tan de carne y hueso, aunque el nombre y el apellido signado en la ficha lo declare todo. Se trata de la actriz Marisa Paredes, de los directores Pedro Almodóvar y Bigas Luna, del compositor Caetano Veloso en actitud simple, con la mirada en otro punto que no el objetivo de quien los persigue con la cámara.

La serie tiene un título adecuado, In fraganti, pues denota no sólo esa actitud involuntaria del actor o el director que no posa sino también la acción del fotógrafo cazador al acecho del Jarmusch más íntimo, del Bardem más bromista y del Almodóvar ensimismado. La exposición se complementa con una serie de fotografías que tienen que ver con el cine —que no con los actores, las actrices ni sus creadores— en tanto que hacen evidente el placer de Prado por lo eminentemente visual, incluso, por la plasticidad de la instantánea, donde se desdibujan las formas para dar lugar sólo al color capturado y al objeto que apenas se asoma.

Toni Kuhn, por su parte, trajo al Festival Internacional de Cine en Guadalajara una colección fotográfica que hace visible el espíritu de flaneur caminante del cinefotógrafo.

La exposición La noción del tiempo toma su título del libro publicado en 2015 por el suizo radicado en México y egresado del Centro Universitario de Estudios Cinematográficos (CUEC). En ella se muestra, de hecho, una selección de imágenes derivadas de ese material bibliográfico.

Kuhn suele hacer recorridos urbanos en busca de objetos, figuras geométricas, naturaleza muerta, paisajes, flora y fauna que son capturados en sus fotografías. Algunas de estas imágenes trascienden lo narrativo para convertirse en documentos abstractos.

En el recorrido, la mirada del espectador se encuentra con fragmentos de pavimento donde algún hoyo, algún bache hace germinar pequeña vida silvestre o se convierte en el recoveco donde un ave muere. El visitante también se topa de frente con espacios arquitectónicos donde Kuhn ha encontrado la belleza simple de los rayos del sol produciendo figuras sobre los muros.

Kuhn explicó durante la inauguración cómo algunas de estas series son, en realidad, extractos de largometrajes realizados por él mismo, basados en la contemplación de rincones donde algo nuevo transmuta.

El libro La noción del tiempo, del cual se exhibe también una copia en las salas superiores del Musa, se compone de dos partes: Las miradas y Las voces; la primera formada por 218 fotografías a color capturadas por Kuhn en los últimos 34 años. Las voces contiene miniaturas en blanco y negro de esas mismas fotografías junto a textos de 68 autores y amigos, de acuerdo con la información que El Centro de la Imagen de la Ciudad de México proveyó para la presentación del libro el año pasado.

EXPOSICIONES

Fotografías de José María Prado, director de la Filmoteca Nacional (España) Musa planta baja

Fotografías de Toni Kuhn, cinefotógrafo suizo radicado en México Musa planta alta

Artículo anteriorUdeG líder en licenciaturas y TSU de calidad
Artículo siguienteTaxis vs Uber