Con la mira en Beijing 2008

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    Aunque los resultados obtenidos por el nadador universitario Juan Yeh, en la Universiada mundial efectuada en Izmir, Turquía, no fueron los que esperaba, esta justa deportiva fue una experiencia positiva, pues enfrentó a rivales de alto nivel.
    El mejor lugar obtenido en esta su primera participación en una Universiada fue el 13, en la prueba de relevos cuatro por 100 libres.
    “Es la primera ocasión que asisto a una competencia de carácter mundial. No cumplí con mis expectativas, que eran pasar a la final o bajar mis tiempos. Falló algo del programa y me quedé corto en los tiempos, pero la experiencia resultó grata por el nivel de competidores que asistieron”.
    Con esta participación el estudiante de mercadotecnia, del Centro Universitario de Ciencias Económico Administrativas, cerró su temporada.
    Sin embargo, luego de unos días de descanso, comenzó con el siguiente periodo de preparación, de cara a los Juegos centroamericanos del próximo año.
    “Esa será una competencia importante. Para 2007 buscaremos estar en los Juegos panamericanos, en Río de Janeiro. Queremos cerrar en 2008, en la Olimpiada de Beijing”.
    La participación de México en la Universiada mundial resultó buena, ya que la delegación obtuvo medallas.
    “Fue superado el pronóstico de Nelson Vargas, titular de la Comisión Nacional del Deporte, en relación con la participación anterior. Esto demuestra que el deporte universitario avanza”.
    Considera que la situación de la natación en México es buena, en comparación con otros años, ya que han dado más apoyo a jóvenes de provincia y no tanto a quienes están en el Distrito Federal y el Estado de México.
    “Las autoridades de las diversas entidades del país han notado que hay deportistas con talento, y les brindan apoyo. Existen avances en cuestiones como la contratación de nuevos entrenadores extranjeros y la capacitación de instructores nacionales”.
    De acuerdo con Juan Yeh, las competencias nacionales requieren un fortalecimiento, pues existen pocos eventos en esta disciplina.
    “Las competencias más importantes son el nacional de curso corto, curso largo y el selectivo para cualquier nacional. Hace como tres años realizaron el abierto mexicano, en el que participó Estados Unidos y Cuba, pero ya no lo volvieron a efectuar.
    “En este sentido, faltan competencias de nivel en los estados, mismas que podrían ser distribuidas durante el año”.
    El nadador jalisciense pertenece al Club Guadalajara. Esta institución busca apoyos para que pueda competir en el extranjero y elevar su nivel.
    “Ivar Sisniega es el director de alto rendimiento. Acude de manera constante a los entrenamientos, para estar al pendiente de lo que nos hace falta”.
    Más de 15 años en natación
    A los seis años tuvo su primer encuentro con la alberca y 16 años después, la historia continúa y parece no tener fin.
    Como cualquier niño en clases de natación, a los siete y ocho ya competía y era campeón estatal.
    “Desde los ocho y hasta que tenía 14 estuve compitiendo en el estado. Me iba bien. Cuando subí a la categoría nacional, constaté que no era el único y que te cuesta más trabajo destacar”.
    A los 18 tuvo una lesión. Fue operado por pubitis y dejó las competencias un año, para después caminar cuesta arriba y tratar de recuperar su ritmo.
    “Esto ocurrió entre 2000 y 2001. Desde 2002 fue recobrar mi nivel. Ya este año, en abril, pude nadar como me gusta en la Olimpiada juvenil”.
    Asegura que dentro de dicha olimpiada obtuvo algunos de sus logros más importantes, pues ganó en 100 y 200 metros libres, en los relevos de 100, 200 y combinado.
    “Estoy satisfecho, porque en esa competencia rompí la marca en 100 metros, algo que me dio el pase a la Universiada.
    “Antes había ganado en otras competencias, como en Colombia y en el Centroamericano, en la que obtuve un segundo lugar en los relevos cuatro por 200. También obtuve un segundo lugar en la prueba de relevos de 800 metros libres varonil, del torneo Janet Evans, de Los íngeles, California”.
    Sus jornadas de entrenamiento son intensas: lunes, miércoles y viernes practica dos veces, mientras que martes y jueves solo una, por la tarde. El sábado concluye con otra sesión por la mañana.
    “Una carrera deportiva combinada con el estudio implica sacrificar muchas cosas, como las fiestas, a las que no puedes asistir porque debes entrenar. Esto hace que algunas personas te rechacen, que ya no te inviten a las reuniones, porque nunca vas. Sin embargo, hay quienes sí entienden tu situación.
    “En relación con la escuela, a veces estás durmiéndote en clases a consecuencia del cansancio”.
    Juan Yeh cursa el quinto semestre de mercadotecnia, de manera que otro de sus retos es concluir su carrera.
    “Mientras siga con el estudio, continuaré en el deporte. Después, quién sabe. A lo mejor tendré otras prioridades, aunque no estoy seguro.
    “Es difícil que abandone la natación de la noche a la mañana. Me gustaría especializarme en algo de publicidad, pero creo que dejaré de nadar cuando ya no lo disfrute”.

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