Avisos fatales

    1245

    Nos encontramos en tiempos un tanto desalentadores: por un lado vemos la situación económica mundial, que no tarda en manifestarse en nuestro ya de por sí golpeado país y que si echáramos un breve vistazo a la historia quizá tendríamos más motivos de preocupación, viendo que justamente después de una crisis similar —hace ya casi un siglo— comenzó una Guerra Mundial. Es posible que suene fatalista, pero la historia no se equivoca con frecuencia.
    Por otro lado, el medio ambiente nos pide tregua a la cantidad de agresiones que le hacemos a diario y sin hacer nada por revertir los daños. No nos damos cuenta que nuestro hogar está en agonía y que se manifiesta cobrando vidas a causa de las catástrofes naturales (incendios forestales, inundaciones, deshielo de los polos, sequías, etcétera) y que tarde o temprano recuperará lo que le corresponde, pero con nuestra existencia de por medio. Es posible que vuelva a sonar fatalista, pero la naturaleza no se equivoca jamás.
    Y por si fuera poco, una de las civilizaciones más importantes de la historia —y que orgullosamente habitó el sureste de México— predijo que para el año 2012 habría una renovación de la humanidad, así que pareciera de nuevo que nuestros días están contados. Creo que volví a sonar fatalista, pero los mayas ya usaban el “cero”, predecían eclipses y su calendario es asombrosamente exacto.

    Artículo anteriorJoao Rodríguez
    Artículo siguienteVienen las promesas