Universidad para unos pocos

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En México sólo uno de cuatro jóvenes, entre 19 y 23 años, tiene acceso a alguna institución de educación superior, reconoció el subsecretario de Educación superior, de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Rodolfo Tuirán Gutiérrez, invitado a la Cátedra inaugural del calendario 2009 A, para impartir la conferencia “Desafíos y retos de la educación superior”, y cuya presentación estuvo a cargo del Rector general de la Universidad de Guadalajara, Dr. Marco Antonio Cortés Guardado.
Cortés Guardado, además de destacar la amplia experiencia y preparación en la materia del ponente, subrayó la necesidad de que en México las universidades públicas sirvan de base para la movilidad social de miles de jóvenes, además del reto que representa sentar las bases para una buena gobernabilidad en el país, “sobre todo por los cambios demográficos que hemos vivido en los últimos años, además de que son los jóvenes quienes requieren más apoyo nuestro y quienes demandan más servicios”.
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México con rezago educativo
Para 1950 en el país había únicamente 33 universidades y un pequeño número de estudiantes universitarios. Hoy son 2 mil 500 Instituciones de Educación Superior, con una matrícula en el ciclo 2007-2008 de 2 millones 814 mil 871 estudiantes. De los cuales, la mayor proporción de ellos estudian en universidades públicas, mientras que la matrícula en universidades privadas apenas es de casi 925 estudiantes.
El problema de cobertura tiene un origen, comentó Turaín Gutiérrez, no ha sido posible construir un sistema de educación ágil, eficiente, abierto y flexible. Esto habla mucho del futuro de un país que tiene a tres de cada cuatro jóvenes fuera del Sistema de Educación Superior. Asimismo, esta rezagado respecto a los estándares internacionales, al ubicarse por debajo de los 10 mil dólares per cápita, y con una cobertura cercana al 25 por ciento, mientras que países como Chile, con ingresos per cápita parecidos a México, tiene un nivel de cobertura de 45 por ciento y del Argentina 60 por ciento.
Por esta razón, la SEP se propone lograr una cobertura del 30 por ciento para el año 2012; 45 por ciento para el 2020 y 60 por ciento al 2030. En número de años, nuestro país está rezagado respecto a Chile al menos 12 años y 22 años con Argentina.
“¿Qué hacer para ampliar la cobertura de la educación en los próximos años? Destinar más recursos para crear nuevas instituciones de educación superior, ampliar las instituciones y programas de educación existentes, propiciar el uso más eficiente de la capacidad instalada, y el uso de modalidades e instrumentos asociados a la educación abierta y a distancia”.
Sobre esta última condición el subsecretario de la SEP anunció la apertura de la Universidad Nacional Abierta y a Distancia, que podría iniciar funciones en septiembre próximo.
Afirmó, además, que aunque en la República mexicana existen 156 mil localidades de menos de 100 habitantes en el país que dificultan el acceso de las personas a los servicios educativos, el país está en buena posición respecto a otras naciones en educación virtual. Hoy en licenciatura y técnico superior universitario se tienen contabilizados 165 mil estudiantes y la Universidad de Guadalajara realiza aportaciones significativas en este campo.

Desigualdades regionales
En 2008 se crearon 32 nuevas instituciones de educación superior. Se preguntan por qué crear y no ampliar o fortalecer las existentes, dijo Turaín Gutiérrez, quien aclaró que se puede hacer todo al mismo tiempo. Hay que crear nuevas instituciones en ámbitos donde las oportunidades de educación superior son limitadas, y refirió que este año fueron destinados 8 mil millones de dólares para ampliar cobertura de la educación superior.
Comentó que existen una serie de condiciones que limitan el acceso de los jóvenes a la educación superior, una de ellas es la desigualdad regional y social. En el país hay regiones que tienen niveles de cobertura superiores a la media nacional. Por ejemplo, en el Distrito Federal 50 por ciento de los jóvenes tiene acceso a la educación superior, mientras que en Quintana Roo, el porcentaje es de sólo 14 por ciento.
 Por otra parte, indicó que aunque cada año egresan alrededor de 432 mil estudiantes, las oportunidades para ellos de obtener un empleo digno son escasas, ya que en los primeros años, si encuentran empleo, 50 por ciento de ellos ganan menos de tres salarios mínimos. Además, 45 el por ciento de los ocho y medio millones de profesionales que hay en el país, trabajan en una actividad para la cual fueron formados.

Retos de la educación superior
Tuirán Gutiérrez planteó los desafíos de la educación superior en México: ampliación de oportunidades educativas, desigualdades en el acceso a la educación superior, planeación y calidad, pertinencia y vinculación, entre otros.
“Las universidades públicas han realizado importantes contribuciones al desarrollo local y regional, sobre todo hoy que tienen que cumplir un papel destacado para garantizar una inserción cada vez más favorable de México en la economía del conocimiento. Para aprovechar el potencial de los profesionales se necesitan realizar grandes transformaciones estructurales”, resumió.

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