La agilidad, movilidad y flexibilidad que permite la red universitaria, podrán ser más visibles con la próxima reforma curricular, que pretende aplicar la Universidad de Guadalajara a partir del calendario 2012 B. Esta reforma propiciará la libertad de trayectoria curricular del estudiante del nivel superior.
Con la reforma curricular impulsada por el Rector general Marco Antonio Cortés Guardado y considerada en el Plan de desarrollo institucional 2030, los planes de estudio serán más ágiles, tendrán una mayor apertura y podrán modificarse conforme cambia la dinámica del conocimiento, señaló el coordinador general académico de la UdeG, Héctor Raúl Solís Gadea.
“Ocurre que los estudiantes aprenden muchas cosas de libros, o fuentes de información fuera de la Universidad, y en ocasiones los planes de estudio son tan rígidos que no van adaptándose de manera dinámica a estas transformaciones”.
Con los cambios al reglamento de estudios, explicó Solís Gadea, los alumnos podrán y tendrán la opción de cursar materias de otras carreras, cuyos créditos serán tomados en cuenta, lo que propiciará una formación más integral.
“Un alumno de contaduría pública, por ejemplo, podrá tomar una materia de arte o de literatura, algo que se ofrezca en un centro universitario distinto. Eso es contribuir a hacer realidad lo anterior de una manera más concreta y en el espacio común educativo, lo que justifica la existencia de la red universitaria en Jalisco”. Sin embargo, los alumnos estarán orientados por tutores, que serán asesores académicos y no de acompañamiento.
“Se trata de impulsar la libertad, respetando evidentemente los planes de estudio, a los docentes y el trabajo académico”.
Otro aspecto que pretende cubrir esta reforma, es cambiar la identidad como universitarios y como ciudadanos, mediante un curso de inducción identitario.
Contexto universitario
A decir del coordinador general académico, esta reforma implica una reflexión y análisis a profundidad, para ver las características de cada programa y con ello determinar su pertinencia, así como la cantidad necesaria de créditos para cursarla.
Como resultado de algunas evaluaciones realizadas a los programas de educación superior de la UdeG, se encontró que hace falta reforzar el uso de las tecnologías de información, el uso de la lengua extranjera, además de la necesidad de aprovechar y acreditar el conocimiento adquirido fuera de las aulas, entre otros aspectos.
Ejes curriculares
La reforma curricular considera también un modelo académico que trabaje mediante ejes que articulen transversalmente el currículo del alumno, para que le permita identificar la formación que tiene, así como la vinculación con el posgrado.
Estos ejes están ligados a un proceso de titulación progresiva mediante un concepto de aplicación profesional.
“Si en una carrera se logran identificar tres o cuatro ejes y tú trabajas en proyectos en esos cuatro ejes de la carrera, el alumno se titula, porque ya ha demostrado que puede resolver problemas de orden profesional”, dijo la maestra Patricia Rosas, titular de la Coordinación de Innovación Educativa y Pregrado, de la UdeG.
Los ejes de formación son: básica, fundamental, selectiva para la especialización y selectiva transdisciplinar.
Planta docente
La planta docente –que en conjunto con el estudiante y el entorno productivo forma la triada fundamental considerada por la reforma– será beneficiada, de manera que los docentes puedan ofrecer cursos y actividades diversas de aprendizaje sin tener que pasar por cambios complicados. Además, se les permitirá la movilidad en la red universitaria, de acuerdo a sus intereses de investigación y formación.
“Si nosotros nos decidimos a apoyar las estancias de los profesores en regionales, si se las premias con una estancia en otro campus, sería algo que enriquecería mucho a la red universitaria”, comentó Patricia Rosas.
Poner a tiempo el reloj
Con la reforma curricular, la Universidad de Guadalajara responderá a las tendencias internacionales en educación superior que priorizan la creatividad, el dinamismo y movilidad, afirmó Solís Gadea, quien considera que habrá un antes y un después de la reforma.
“Representa de cierta manera una forma de poner a tiempo el reloj de la Universidad de Guadalajara con el modelo educativo superior del mundo, pero no imitando un modelo específico, sino adaptando uno nuevo, tomando en cuenta muchas cosas, entre éstas a las universidades más exitosas”.
Además de ponerse a tono con las tendencias internacionales, la maestra Patricia Rosas consideró que la reforma ayudará a afrontar el reto que tienen las universidades de demostrar que todavía son útiles.
“Nuestro desafío como universidad es enorme. Tenemos que demostrar que somos capaces de seguir existiendo, que seguimos sirviendo. Esto es difícil, porque lo que está pasando es que cada vez más las contrataciones se están yendo hacia la demostración de habilidades”.
