La historia de Romeo y Julieta, dentro de un contexto contemporáneo, es la apuesta de la compañía Glow Artes Escénicas y Arte y Causa, una producción que pretende acercarnos a este clásico de la literatura universal, pero desde un punto de vista en donde el lenguaje y las actuaciones funcionan como elementos de transición, sin alterar o modificar sustancialmente el contenido del relato.
Dirigida por Manuel Medina, Romeo y Julieta es un trabajo escénico en el que participan más de una veintena de actores. De esta manera, para el equipo de producción, la consigna principal radica en entregarse al desarrollo de personajes que vayan más allá del arquetipo.
“Se trata de una adaptación. Respetamos la historia de Shakespeare. La puesta en escena está constituida de algunos recortes en el texto y también en pequeñas adaptaciones que están relacionadas con la forma de utilizar el lenguaje: en hacerlo más natural”, dice el director de esta obra.
Situada en Verona, Italia, la historia centra su propósito en la tragedia de dos jóvenes y en el convulso contexto familiar que los rodea. “Le tengo mucho respeto a Shakespeare. Sólo tenía que llevar la historia hacia una época actual. Así es como buscamos alcanzar una empatía y una catarsis con el público. El reto es mostrar que las tragedias son eternas”, señala Medina.
Parte del elenco está conformado por Magdalena Carballo, Carmen de León, Camila de Santiago, Julio Ávila, Marco Aurelio Hernández y José Humberto Fuentes. “Interpreto a una mujer fuerte, quien de alguna manera representa la autoridad”, menciona Magdalena Carballo. La veterana actriz personifica a la Princesa, una figura que, aunque tiene una intervención pequeña, determina algunas de las escenas más importantes de la obra. Romeo y Julieta es una puesta en escena que tiene una duración de aproximadamente dos horas. La representación está dividida en dos actos y se distingue especialmente por conjugar el talento de noveles y experimentados actores.
