Un museo sustentable

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El Museo de las Artes (Musa) recibió la recertificación por parte de la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial (Semadet), del Gobierno del Estado, como resultado de un sinnúmero de cambios y ajustes que el equipo del museo realizó en diversos aspectos de su trabajo diario.

Esta certificación como espacio amigable con el medio ambiente tendrá una validez de dos años y avala por segunda ocasión el trabajo que el personal del museo realiza para disminuir los elementos contaminantes y a erradicar completamente los productos de plástico de un solo uso, explicó Maribel Arteaga, directora del recinto universitario.

La utilización de artículos de cocina reusables, el ahorro de energía eléctrica mediante el cambio a focos tipo led, el uso de materiales para las exposiciones que estén certificados como amigables con el medio ambiente, pintura con base en agua, el cambio del equipamiento sanitario, la separación y recolección de la basura, vehículos no contaminantes y el control del aire acondicionado, son algunas de las medidas que el equipo del museo ha tomado desde hace cuatro años, cuando fueron certificados por primera ocasión.

“El programa de certificación ambiental voluntario está enfocado para todo el inmueble. Que toda su operación y actividad sea lo más sustentable posible. Dentro de estas prácticas está la programación de mantenimiento e intervención a los equipos, por ejemplo, del aire acondicionado, los detectores de humo o el desazolve de fosas sépticas conforme a los requerimientos de Semadet, además que los productos de limpieza sean biodegradables o con químicos no contaminantes”, afirmó José Miguel Aguayo, coordinador de servicios generales del museo.

Tanto los equipos como su utilización, los procesos de limpieza, administración y organización del museo (un edificio con más de un siglo de antigüedad) son supervisados todos los días de manera puntual y fueron avalados por miembros de la Semadet de acuerdo a sus estándares.

Todos estos procesos son acordes a los requerimientos museográficos de este espacio y no van en detrimento de la calidad de las exposiciones. Por el contrario, mejoran la experiencia de los visitantes, quienes también son parte de estas medidas, como el ahorro de agua y luz y la separación de residuos.

Este ahorro de materiales y recursos se ha traducido en una disminución del gasto económico de cerca de 20 por ciento, aunque la intención principal consistió en que el edificio fuera lo más sustentable posible para cumplir con los requerimientos de Semadet, dijo Alfredo Moseley Ochoa, administrador del museo.

Además del Musa, otras dependencias de la Universidad de Guadalajara cuentan con esta certificación, como la Preparatoria de Tonalá, el Festival Internacional de Cine en Guadalajara y la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, aunque en el caso de estos dos últimos sus procesos tienen el aval por evento, es decir, durante los días en que realizan sus principales actividades.

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