Sergio “Cayo” Díaz

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Desde los 17 años se considera un León Negro de corazón. En su pecho los colores universitarios están tatuados desde los tiempos memorables de la escuadra universitaria. Hoy pasará a la historia como el primer técnico del equipo, que luego de 15 años reaparecerá en el Torneo Apertura 2009 de la Primera División “A”, con la única consigna de regresar al máximo circuito. Sergio “Cayo” Díaz fue anunciado como director técnico de los Leones Negros y asume el reto con alegría, orgulloso y confiado en hacer un buen trabajo con la escuadra que lo vio nacer como futbolista y a la cual nunca dejó de perderle la pista, incluso después de desaparecida la franquicia de la primera división. Platíquenos de su trayectoria como jugador Yo comencé en 1977, cuando llegué a la Universidad de Guadalajara a la juvenil de segunda, con el entrenador Sergio Estrada, quien me dijo que yo tenía posibilidades de alcanzar algo importante. De ahí pasé a las reservas profesionales con el entrenador Roberto Gutiérrez y, posteriormente, es Gustavo Peña quien me metió al torneo de nuevos valores, que ya era primera división. Mi debut fue contra León y metí un gol. Después me bajaron a segunda división y el entrenador el Guillermo “Yuca” Sánchez me debutó en primera división contra Cruz Azul y así siguieron una serie de entrenadores con los que estoy agradecido, ya que me permitieron llegar a ser el mejor defensa de México en ese tiempo. Permanecí en UdeG desde 1977 hasta 1991. ¿Alguna anécdota que recuerde? Hubo muchas. Previo a mi debut yo iba a jugar con Bachilleres de la segunda un partido contra Veracruz, y en Puebla me buscaron en el hotel y me regresaron para jugar al día siguiente con la primera división, cosa que nunca esperé. Fue una sorpresa agradable. ¿Cómo recuerda a la afición? Muy exigente y conocedora. Así era la afición de la UdeG. Le gustaba el buen futbol, el toque de pelota, y nosotros lo teníamos. Por eso se distinguió el equipo. ¿Cuáles fueron los mejores momentos? Fueron varios. Sobre todo cuando llegamos a las tres finales. Yo sólo participé en una y llegamos a ser campeones del torneo de nuevos valores. ¿Qué significado tiene ser el DT del equipo que lo vio nacer? Enorme. Significa mucho para mí, ya soy parte de la historia de la Universidad de Guadalajara. Primero como jugador, y ahora como entrenador en el regreso del equipo. Me siento orgulloso, contento y feliz; pero igualmente comprometido porque sé que la afición universitaria ha estado esperando el regreso y el compromiso es muy grande. ¿Cuáles son los planes? Queremos conformar un equipo competitivo para aspirar a ascender y ser campeones. Soy un convencido de que en base a un buen trabajo, disciplina y dedicación se puede lograr todo. Soy afortunado. Primero porque nací en este club y lo que soy es por UdeG, desde los 17 años soy León Negro. ¿Cuándo iniciaron los trabajos con el equipo? A partir del miércoles 3 de junio empezamos con las visorías para jugadores que ya hayan militado en la Primera División “A”. Además he estado al pendiente del trabajo de fuerzas básicas. Queremos conformar una buena base. Tuvimos la oportunidad de ver a jugadores universitarios y del Tapatío y la oportunidad se la vamos a dar a los que sean capaces de pertenecer a este proyecto. ¿Hay tiempo suficiente para armar el equipo, previo al arranque del torneo? Es corto, ya que vamos a arrancar de cero. No había una base y tenemos que armarlo rápido, para llegar al torneo lo mejor posible. Algún mensaje para la afición Mando un saludo a la comunidad universitaria. Estoy convencido de que la afición va a llegar a apoyar el equipo con todas las ganas. No les vamos a fallar, vamos a demostrar la garra, por eso somos Leones, vamos a dejar el corazón y el alma en la cancha, con buen manejo de pelota, sello característico de la UdeG.

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