Por una biología más humana

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DRA. ANA ROSA RINCON SANCHEZ

El respeto por la vida es un valor imprescindible que debe inculcarse al alumno de ciencias biológicas y de la salud. Las prácticas que hacen necesario que el alumno tenga que matar animales para estudiar el funcionamiento de su organismo contradice este principio. Con el fin de difundir formas y técnicas alternativas que reemplacen tales rutinas, acordes a una visión ética e integral de la ciencia, se llevará a cabo el primer Tour Latinoamericano de InterNICHE, donde la Universidad de Guadalajara será considerada.
Por lo general en muchas universidades mexicanas los estudiantes tienen que sacrificar perros, gatos, ratones, conejos, ranas, pollos, etcétera. “Es muy impactante para muchos estudiantes tener que matar a un perro a las dos o tres semanas de haber ingresado a algunas carreras. El chico se siente presionado por parte de sus educadores, de los demás compañeros. Se aísla de los otros al negarse a participar en alguna práctica escolar”, afirmó Ana Sofía Ponce Partida, coordinadora del proyecto Alternativas Animales en la Enseñanza, dentro de la Universidad de Guadalajara y quien también labora para InterNICHE.
El que los animales se maten dentro de las universidades no implica que los métodos sean más humanos. “En algunos casos los animales mueren desangrados y no utilizan anestesia, en otros casos sí la usan. Lo negativo en este contexto es que la formación ética del estudiante puede verse comprometida si para enseñarlo tiene que matar. Puede haber una tendencia a la desensibilización, ya que los últimos semestres es menor la ansiedad y el nerviosismo que les generan este tipo de prácticas”.
Además, muchos estudiantes con aptitudes para diversas carreras en el área de la salud o biológicas, no quieren entrar a estudiarlas porque saben que tendrán que sacrificar a un ser vivo. Otros prefieren desertar.
El muchacho debe tener el derecho y sentir la libertad de negarse a participar en una actividad que considere que va contra sus principios éticos. En algunas universidades extranjeras como Harvard utilizan otras opciones para formar a sus alumnos. “Un muchacho al que se le enseña que la vida es tan valiosa que no se puede atentar contra ella, y por lo tanto se utilizaron otros métodos para que aprendiera, será un futuro profesional con una visión y percepción de su entorno muy distinta a uno que se le dijo que era correcto utilizar un animal como un material más de laboratorio. El respeto hacia la vida del primero será mayor”.
Entre las alternativas sustitutas están los Cd-rom interactivos, maniquíes, simuladores, hasta cuerpos y órganos plastinados, también se pueden obtener cadáveres de fuente ética. Esto quiere decir que se pueden conseguir cuerpos de animales que murieron por causa natural, una enfermedad terminal o accidente en las clínicas y hospitales veterinarios. “Lo importante es la no utilización de animales sanos, que se obtienen del antirrábico”.
Señaló que la UdeG podrá hacer frente a los gastos que estos materiales implican, de manera paulatina. “La ventaja de estas opciones es que en un principio el desembolso inicial es fuerte, pero a la larga es más barato, ya que un órgano plastinado tiene muchos años de vida útil, igual un simulador. En cuanto a la obtención de cadáveres de fuente ética, no representan un gasto excesivo porque los cadáveres ya están ahí, pero sí se tiene que invertir tiempo para diseñar el programa de donación de cadáveres, hacer el convenio con diferentes clínicas veterinarias y hospitales, tal vez el transporte de éstos cueste”.

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