Existen amplias posibilidades de que se queden sin efecto los más de 172 mil amparos masivos promovidos por las y los trabajadores de todo el país contra la reforma a la Ley del Instituto de Seguridad Social al Servicio de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), afirmó el profesor investigador del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH), íngel Guillermo Ruiz Moreno.
El experto en la materia detalló que en la última asamblea ordinaria de la Academia Mexicana de Derecho de Seguridad Social, acudió el ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Sergio Val Hernández, quien “dijo que la reforma a la Ley del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) no era inconstitucional, por lo tanto, al homologarse la reforma del ISSSTE a la Ley del IMSS, tampoco es inconstitucional”, por lo que él presentía que serán declarados infundados todos los amparos promovidos en contra.
También aseguró que la reforma debía hacerse, que las reformas son dolorosas, y hay dos maneras de hacerlas: de modo pacífico, mediante la normatividad jurídica y o con una revolución.
Ruiz Moreno señaló que no esta de acuerdo con la postura del ministro, “porque una vez más pierden los trabajadores. El problema es el costo social enorme que lleva consigo”.
Mientras que un trabajador ordinario tiene derecho a una pensión equivalente a un salario mínimo, la pensión de un ministro de la SCJN es de alrededor de 250 mil pesos mensuales.
¿La postura del ministro Val es personal o habló a nombre de todos los integrantes de la SCJN?
Él dijo que está convencido de que la reforma a la Ley del ISSSTE es constitucional, y al trabajar en el seno de la Suprema Corte, él ha sensibilizado a sus compañeros ministros.
Agregó Ruiz Moreno que lamentablemente los amparos promovidos por trabajadores que gastaron dinero y tiempo en contra a la reforma a la Ley del ISSSTE, quedarán sin efecto.
“Se resuelve el expediente y queda intocado el acto. Así de simple. O sea, no se va a modificar nada. Auguro que los más de 172 mil amparos que representan medio millón de quejosos, promovidos entre abril y mayo de 2007, más los promovidos en los primeros meses de 2008, van a ser declarados sin materia y van a dejar que cada uno de los trabajadores, cuando llegue su momento de jubilación, haga valer sus derechos en juicio, para ver que fue lo que obtuvo, y se acabó. En mi opinión, es un asunto vergonzoso. Así de simple”.
A pesar de ello, sindicalizados en Tamaulipas continuaron el 1 de febrero pasado con su labor de recaudación de firmas de trabajadores y derechohabientes del ISSSTE, con la finalidad de ampararse contra la reforma a la ley, por considerar que lesiona los intereses de la clase trabajadora.
En marzo de 2007, legisladores federales del PAN, PRI, PVEM, Panal, Alternativa, votaron a favor de la iniciativa de reformar la Ley del ISSSTE. En contra lo hicieron las bancadas del PRD, Convergencia y PT.
El 1 de abril de 2007, entró en vigor la reforma a la ley en mención. A la distancia, el director general del ISSSTE, Miguel íngel Yúnez Linares, aseguró que las reformas permitirán sanear las finanzas y mejorar las condiciones de atención a los derechohabientes. Los trabajadores, al jubilarse tendrán garantizada su pensión y “no habrá un riesgo en su situación personal…empezamos la reconstrucción del instituto”.
Antes de la reforma
La página electrónica del ISSSTE afirma que para pagar una pensión se contaba con las contribuciones de 4.6 trabajadores cotizantes, que apenas cubría alrededor de 30 por ciento de la misma. El 70 por ciento restante debía ser cubierto con subsidios provenientes de los impuestos que paga la población nacional, y más de la mitad de esta población no tiene acceso a servicios de seguridad social.Â
El número de jubilados en el ISSSTE ha crecido más rápidamente que el de trabajadores en activo. En los últimos 20 años, los primeros aumentaron casi 600 por ciento y los segundos apenas un 50 por ciento.
Las 10 razones oficiales para hacer la reforma fueron: rescatar y fortalecer la institución, que los servicios y prestaciones respondan a las necesidades actuales, garantizar la cobertura y calidad de los servicios, garantizar el derecho a la pensión, ampliar con equidad el número de créditos hipotecarios, mejorar los servicios sociales y culturales, contribuir a la formación de un sistema nacional de seguridad social, fortalecer la corresponsabilidad del Estado, hacer un régimen de seguridad social sustentable sin que represente una carga para los contribuyentes y construir un instituto moderno que garantice la eficiencia y el sentido humano.
Aviso
El ISSSTE informó en un comunicado de prensa que los 600 mil jubilados y pensionados que atiende deberán acreditar su vigencia de derechos correspondiente al primer semestre de 2008. La fecha límite para cumplir con dicho requisito vence el 15 de abril.
El ISSSTE aseguró que al acreditar su vigencia de derechos dentro del plazo establecido, los pensionados garantizan el pago oportuno y continuo de sus percepciones.
