Perdidos en la traducción

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Carlos Reche tiene una profesión poco común, es intérprete. Sabe hablar español, italiano, portugués e inglés. Reche, de 32 años, nació en Córdoba, España, vivió en Atenas, Roma, Portugal y actualmente radica en Chile. Dice que ser traductor tiene ventajas: “Te hace poder vivir en distintas culturas al mismo tiempo y poder aprenderla de primera mano. Percibir la realidad en la manera que fue expresada, de ser fiel a la emoción”.
Para Hermelinda González, presidenta de la Organización Mexicana de Traductores (OMT), “la traducción nos permite acceder a los nuevos avances tecnológicos, a la literatura, la cultura, el intercambio de ideas. Son los traductores e intérpretes los que hacen posible la comunicación entre personas y culturas. Si no fuera por ellos, nuestro conocimiento de lo que sucede en otras partes del mundo, sería muy limitado”.
La traducción desempeña un papel esencial en la vida cotidiana, pues gran parte de la información que recibimos llega a nosotros por medio de una traducción de textos literarios hasta no literarios, traducciones de un catálogo electrodoméstico, de arte, hasta la poesía, comentó Juan Carlos Reche.
En la Unión Europea existen 27 países miembros y 23 lenguas oficiales, y cuentan con políticas para impulsar el multilingí¼ismo. Con esa visión Juan Carlos Reche explicó que hace 40 años el francés era la lengua más estudiada en el viejo continente, ahora es inglés y en los próximos años será el chino-mandarín, por lo que los nuevos traductores se han empezado a especializar en ese idioma.
El número de hablantes de chino-mandarín ronda 885 millones de personas en el mundo, colocándola como la lengua más hablada, luego está el inglés con 440 millones de personas y el español en tercer lugar con 380 millones de hablantes.
En México la situación es distinta. En Jalisco, el 85 por ciento de la traducción sigue siendo en inglés, dijo Fernando Espada, administrador general de la empresa Traductores Asociados de Occidente, después el francés y alemán.
Sin lugar a dudas, la ubicación geográfica de México, como vecino del sur de los Estados Unidos, ha originado que se encuentren en contacto frecuente las lenguas castellana y anglosajona, hecho que también ha suscitado que la labor de traducción encuentre un campo fértil para su esparcimiento, comenta en su estudio “Semblanza de los estudios de traducción en México”, María Patricia Velázquez Martínez, investigadora de la Universidad de Guadalajara.
Sin embargo, esta actividad es llevada fuera de los parámetros profesionales reconocidos por estudiosos de la profesión, ya que varios estudios han demostrado que si bien existen muchas personas que conocen el idioma inglés y que se sienten competentes para realizar traducciones del inglés al español, estas mismas personas desconocen las normas lingí¼ísticas del español, frecuentemente su lengua materna. Por lo tanto, el producto de las traducciones es, la mayoría de las veces, de dudosa calidad.
Para María Luisa Arias Moreno, coordinadora de la sección de traducción de la UdeG, por desgracia hay un gran desconocimiento ya que se tiene la idea errónea de que cualquiera puede traducir con ayuda de diccionarios, o peor aún de los “traductores electrónicos” que se encuentran en internet, que ocasiona que muchas personas sin preparación se dediquen a hacer traducciones de pésima calidad.
La traducción profesional implica educación, años de capacitación, saber factores léxicos, semánticos, sintácticos, culturales, pragmáticos… no consiste solamente en cambiar una palabra por otra, es necesario saber de la cultura y de las disciplinas que traduce.
“En el caso particular de Jalisco, solamente dos instituciones reconocidas tienen entre sus cometidos la enseñanza de la traducción: Universidad Autónoma de Guadalajara y el capítulo Occidente de la OMT”, indicó Velázquez Martínez.
Fernando Espada indicó que cada año egresan al menos 10 traductores e intérpretes y en total suman 200 profesionales donde su campo de acción está en congresos universitarios, empresariales y políticos.
“Hay bastante trabajo en los congresos de medicina, es muy tradicional en Guadalajara, se trabaja también para las empresas, cámaras empresariales o de tipo gubernamental que sirven para capacitar al personal de cada lugar”. En los últimos años el número de horas y de días de los congresos han disminuido, incluso la mayoría de las conferencias se organizan antes de las vacaciones de Semana Santa, Navidad o verano.
El salario del intérprete varía según el tipo de idioma que domine. Por una sesión de inglés (idioma que tiene mayor oferta y demanda) se paga entre mil 500 a dos mil 500. Para quien traduce francés o alemán, el sueldo alcanza hasta cinco mil pesos por día.
La investigadora María Patricia Velázquez indicó que el panorama relacionado con la traducción se encuentra en vías de desarrollo, aún se hace evidente la necesidad de contar con programas de formación de traductores profesionales. A los mexicanos no sólo nos hace falta comunicarnos con otras culturas, hace falta traductores a lenguas indígenas para comunicarnos entre nosotros mismos.

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