Nueva cima a la vista

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Una nueva ruta está trazada. La cordillera central de Alaska, con meta principal en el monte Denali, también conocido como Mckinley, es la expedición en puerta del estudiante de arquitectura del Centro Universitario de Arte, Arquitectura y Diseño (CUAAD), Daniel Araiza Chávez, travesía que dará inicio el próximo 13 de mayo.
En compañía de Carlos Petersen, estudiante del ITESO, emprenderá el camino para alcanzar la cima de dicha montaña, con una altura de 6 mil 196 metros sobre el nivel del mar, la más alta de Norteamérica y una de las más frías del mundo por su ubicación junto al círculo polar írtico, donde existe una mayor presión atmosférica y donde las tormentas de nieve se mueven más rápido.
Por todos estos factores, el principal reto para los alpinistas universitarios serán las condiciones climatológicas, expresó Daniel Araiza Chávez.
“Son condiciones climatológicas más adversas. Tenemos experiencia. Como por ejemplo, la cordillera de Los Andes, donde he estado cuatro veces y adquirí experiencia en cuanto a las condiciones que se presentan ahí, pero en Alaska el lugar es más inhóspito. Desde el principio estás en constante exposición a diferentes factores, como el clima y el desgaste físico del cuerpo”.
La preparación para esta nueva expedición inició hace casi seis meses y está basada en trabajar lo físico, técnico y mental, para sobrevivir en esas condiciones.
“Un aspecto es el físico. Ahí son muchos parámetros los que consideramos, por lo que realizamos diferentes tipos de entrenamiento. Fortalecemos músculo para hacerlo resistente y para que cardiovascularmente estemos a la altura de la exigencia de la montaña y eso se adquiere andando en bicicleta, subiendo cerros, nadando y a través de diferentes actividades. Esto complementa el entrenamiento, de acuerdo a la expedición. Como en este caso es una ruta que nos va a exigir mucha resistencia cardiovascular, más que técnica, hemos estado entrenando ese aspecto, además de que la técnica se va adquiriendo con la experiencia”.
Considera que el alpinismo es supervivencia en su máximo esplendor, es sobrevivir a las condiciones que se presentan y por ello es de vital importancia la comunicación con el compañero y conocer sus fortalezas y debilidades, ya que la vida de ambos está en juego.
“Nos vamos el 13 de mayo y regresamos el 22 de junio. Estaremos del 18 de mayo al 18 de junio en el glaciar. La montaña la queremos subir en tres días. Contamos con días de aclimatación. Es un mes por las cuestiones de clima, ya que cambia mucho y debemos tener días de reserva y no depender de que si el clima empeora y no puedas subir a la montaña”.
Una vez alcanzada la primera meta, tienen considerada una segunda parte de la expedición, consistente en subir el Monte Hunter, una de las principales elevaciones de Alaska, cuyos 4 mil 442 metros sobre el nivel del mar lo sitúan como la tercera montaña más alta de la cordillera de Alaska.
Para el próximo 27 de abril, a las 10:30 horas, los alpinistas ofrecerán una charla en las instalaciones de la videoaula Silvio Alberti, del CUAAD, donde darán a conocer el proyecto, así como algo de su currículo en este deporte.

Los apoyos
Conseguir los recursos para las expediciones ha sido una constante para Daniel y Carlos, quienes realizan diversos eventos para la obtención de fondos. Tal es el caso de la exposición-subasta de fotografías de montaña, realizada hace algunas semanas, entre otras acciones.
“Recibimos algunos apoyos de empresas y particulares. Económicamente nos apoya Equipos Médicos Nafarrete. El Code nos apoya con los recibos deducibles de impuestos que entregamos con los donativos y la UdeG con algunas facilidades, y seguimos en la búsqueda de más apoyos”.
Los interesados en conocer más y apoyar el proyecto, pueden escribir al correo electrónico: montemckinley2012@gmail.com

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