Navegante cerebral

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Los tumores cerebrales representan la segunda causa de morbi-mortalidad en pacientes pediátricos con cáncer, mientras que las lesiones en la columna tienen una incidencia en la población del 80 por ciento. Al parecer ambos padecimientos no tienen relación, sin embargo los dos podrían ser operados de manera más precisa y segura gracias un neuronavegador, herramienta de neurología de última generación que se utiliza en grandes centros quirúrgicos a escala mundial, debido a que permite reconocer de manera precisa la ubicación, forma y volumen de la patología a tratar, sin afectar las capacidades del paciente.
El OPD Hospitales Civiles de Guadalajara pretende adquirir este equipo con el fin de tener mejores resultados quirúrgicos y por lo tanto, que el paciente tenga mejor respuesta al tratamiento.
El sistema de neuronavegación consta de un equipo de cómputo que permite hacer cortes y procesar imágenes, que conjuntamente con un sistema de localización informa en qué zona de la que se opera se encuentran los instrumentos quirúrgicos.
Según explicó el responsable de Neuropediatría del Hospital Civil “Fray Antonio Alcalde”, Juan Luis Soto Mancilla, el funcionamiento de esta tecnología puede compararse con el Global Positioning System (GPS) o Sistema de Posicionamiento Global GPS, instrumento que utilizan automóviles de modelo reciente y el cual permite establecer un mapa y una estrategia de cómo llegar al objetivo. “Se utiliza para lesiones profundas o que están en ciertos puntos del cerebro en los que necesita uno ser muy preciso para no dejar una secuela. Utiliza un sistema con el principio de GPS, una triangulación óptica”.
El responsable de la Clínica de tumores cerebrales, del Hospital Civil “Juan I. Menchaca”, Ramiro López Elizalde, expuso que el principal beneficio radica en que “tendríamos una forma de planear el procedimiento quirúrgico, teniendo información previa del paciente de dónde se encuentra la lesión y la ventaja es que podemos rediseñar la estrategia, los resultados serían que existirían menos posibilidades de dañar zonas que representan puntos vitales para el paciente”.
Dicha tecnología cuenta con un sistema informático capaz de tomar las imágenes de la resonancia magnética y la tomografía del paciente, para reconstruir en forma tridimensional la imagen del cerebro. Con ello, el especialista obtiene una visión precisa de la zona afectada, su ubicación exacta y determina el acceso más adecuado al tumor. Además, mediante el microscopio es posible observar la orientación y las características de la lesión que está extirpando.
El neuronavegador tiene un costo de 400 mil dólares, (aproximadamente cinco millones de pesos), y es comercializado por marcas canadienses, de Estados Unidos, alemanas y austríacas.
Hasta ahora, las operaciones de tumores cerebrales que se realizan en los Hospitales Civiles se han llevado a cabo con la renta del aparato, costo que oscila entre los 14 mil pesos por evento, por lo que está fuera del alcance de la mayoría de los pacientes.
Según información del Hospital General de México, el neuronavegador ofrece ventajas como: pequeñas incisiones lineales, craneotomías centradas con exactitud, capacidad de encontrar lesiones de tamaño milimétrico, menor tiempo quirúrgico y menor riesgo para las zonas de importancia funcional, así como menor número de complicaciones postquirúrgicas, menor riesgo de secuelas, corta estancia hospitalaria y menor defecto cosmético.

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