Más que una simple frase o un juego de palabras, el título de esta nota hace referencia a la importancia de conocer a una de las agrupaciones que dejó huella dentro del circuito underground en México, y que ahora, a través del documental Nadie puede vivir con un monstruo, de Mario Mendoza, es posible tener una noción más profunda de lo que ocurrió y ocurre –como un fenómeno que logra traspasar el tiempo- con una de las bandas pioneras de punk, new wave y tecno pop en este país.
Size nació a finales de los setenta del siglo XX y constituyó el prototipo de agrupación que abriría el camino para Caifanes y Fobia, entre otros. Integrada por Illy Bleeding (Jaime Keller), Dennis Sanborns (Walter Schmidt), This Grace (Carlos Robledo) y Dean Stylette (Alfonso Moctezuma), rompió con los paradigmas del rock en México y rápidamente logró convertirse en un proyecto respetado.
Nadie puede vivir con un monstruo recopila momentos decisivos para Size e incluye testimonios de sus miembros y personajes cercanos al grupo. El inicio de una corta pero invaluable trayectoria, la pasión por la música, las dificultades para permanecer unidos y vivencias poco conocidas, dan forma a este documental que permite valorar el legado musical de un grupo que continúa deslizándose entre las olas del tiempo.
