Músculos sexo y mucha ketchup

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Normalmente, cuando se habla de diversidad, la primera imagen que suele aparecer en la mente es la de una marcha con tintes de carnaval. Con personajes exóticos, banderas de mil colores, hombres y mujeres con vestimentas provocadoras, con escotes hasta el ombligo, con faldas cortitas y cientos, quizá miles de personas exigiendo respeto a sus preferencias sexuales. Tal cual, como el ser gay, dice Carlos, un joven de 22 años, estudiante de la carrera de administración de empresas.
Carlos, después de años de sentirse fuera de lugar y con problemas existenciales, aproximadamente a la edad de 18 años, se liberó (“salió del clóset” para el argot buga) y se declaró gay. Él comenta que ser gay es una forma distinta de ver la vida, y para hablar de la diversidad se parte de distintos puntos, en los cuales está la familia, los amigos y lo primordial: toda la sociedad.
En la edición 27 del Festival Internacional de Cine en Guadalajara (FICG), habrá un nuevo abanico de opciones para disfrutar de un cine diferente, si bien de gran calidad y con temas diversos. También es la primera ocasión que será entregado el Premio Maguey, que proyectará lo mejor del cine Queer, y LGBTTTI, del 5 al 9 de marzo en el Teatro Diana.
Probablemente esta exhibición despierte el morbo de muchos o quizá genere críticas, y Carlos lo sabe. Él dice que esto surge por el miedo de quienes aún no se atreven a mirar esta realidad.
Cuando Carlos supo sobre el Premio Maguey, se sorprendió. Desde el momento de ver el cartel oficial, la cara se le llenó de asombro y lo primero que hizo fue ver la guía para ver las películas y con esto apoyar la nueva iniciativa. “Creo que es importante y necesario que se realicen estos eventos, para ir abriendo mentes y despertar en la sociedad el interés por las personas con estas preferencias”.
Una vez que estudió la cartelera, Carlos sonrió y dijo: “Me llama la atención ver la de Ausente” (filme argentino de 2011, del director Marco Berger, que proyectarán el lunes 5 de marzo, a las 18:00 horas, en el Teatro Diana) y después de leer la sinopsis dijo: “con razón me gustó”, después de una pequeña carcajada, mientras jugaba con las manos, con el collar que sobresalía de su camisa entreabierta, “aunque el maestro está bien feo”.

Gay… maguey
¡Listos! Así afirman estar los organizadores del Premio Maguey, encabezados por Pavel Cortés, en esta que será la primera vez que entreguen dicho galardón en el marco del FICG27. El Premio Maguey nació como propuesta desde el año pasado y lo que intenta es algo referente a las vanguardias de los mejores festivales del mundo. Esta sección paralela al FICG27 tendrá como objetivo principal mostrar películas con temas de la diversidad sexual. “Se invitaron a los festivales con una mayor trayectoria, mayor prestigio sobre el cine Queer y cine diverso. La intención es que haya un espacio destinado a este tipo de cine, de películas, de directores”.
Como asegura Cortés (quien se estrenara como realizador en el pasado festival con el corto Make up), el nombre de Premio Maguey surge con la plataforma del festival: “Tratamos de buscar una similitud al premio oficial que se entrega en el festival, que es el Premio Mayahuel, y pensamos que Premio Maguey podría ser divertido, porque se presta a este juego de palabras: gay, maguey. Aparte que vimos que el maguey es una planta que carece de sexo, que se autorreproduce. Es como hermafrodita, como asexuada, que al mismo tiempo hace las dos funciones: se fecunda a sí misma. Es un rollo de biología, pero nos pareció un punto importante para representar”.
El Premio Maguey estará presentando año con año, y en esta edición entregará cuatro preseas, que serán: Premio Maguey a la mejor cinta, Premio Maguey al cine de culto, Premio Maguey activista y Premio Maguey al homenaje póstumo, que en este caso será destinado para Derek Jarman, director de cine ya fallecido, y lo recibirá Andrew Logan, quien fue muy cercano al director.
El premio al Cine de culto será para el polémico fotógrafo y director de cine canadiense Bruce LaBruce, después de presentar su nueva cinta L. A. Zombie, mientras que el Premio Maguey al activismo será para la cantante Mónica Naranjo, quien según comenta Pavel Cortés, ha sido uno de los que mayor expectativa ha despertado, no sólo del Premio Maguey, sino del FICG27 en general.
Las películas que competirán por el premio y que están en cartelera son: Un año sin amor (Argentina, 2004), de la directora Anahí Berneri; Otto or up with dead people (Otto o arriba con la gente muerta, Alemania, 2008), del director Bruce LaBruce; Spinin (España, 2007), de Eusebio Pastrana, y Plan B (Argentina, 2004), del realizador Marco Berger.

“El príncipe de los
homosexuales”
Este primer año recibirá el Premio Maguey al cine de culto el artista canadiense (autoproclamado “príncipe de los homosexuales”) Bruce LaBruce, quien presentará su más reciente película L. A. Zombie. Labruce es conocido por sus producciones con fuerte contenido sexual y por su capacidad de expandir los límites del escándalo. Recientemente una exposición fotográfica de su autoría en Madrid –con estrellas de rock como la cantante Alaska representando escenas religiosas– fue atacada con una bomba molotov.
A lo largo del tiempo, LaBruce se ha caracterizado por mostrar y tocar temas que no son bien vistos por la sociedad. Su obra vive perseguida por la censura y el morbo. Por tal motivo sus muestras fotográficas son víctimas de la crítica, así como su cinematografía.
Con respecto al cineasta afincado en Vancouver, Pavel Cortés mencionó ser un ferviente seguidor de su trabajo y a la vez lo calificó como artista romántico, con tintes de nostalgia y hasta cursi. Sin embargo, con esa sátira que lo caracteriza, “de repente parece que Bruce LaBruce se burla de sus espectadores y los reta”.
Aunque LaBruce no deja de ser un punto que marcará por completo el inicio del Premio Maguey, y más por la controversia que causó su muestra fotográfica Obscenity, que están exhibiendo en Madrid. Desde el título su exposición es provocadora. Muchos la han calificado de irreverente, y otros de descarada. Incluso los críticos cuestionan si en verdad es arte o pura provocación.
Con respecto al escándalo en Madrid, y al rechazo que puede causar un director como Bruce LaBruce, en una ciudad como Guadalajara, Cortés fue claro al señalar: “No nos interesa causar polémica con Bruce. Lo elegimos por su excelente trabajo. Nos pareció interesante que antes de que venga a engalanar el Premio Maguey, haya pasado esto en Europa. Sin embargo, no nos agarramos por completo de la polémica. Eso quizá nos fortalezca”.

L. A. Zombie
Buena parte del cine de Bruce LaBruce muestra las contrariedades de la sociedad. L. A. Zombie lleva esta “broma” al extremo, al punto de mostrar cómo el semen de un zombi extraterrestre puede tener poderes curativos y “dar vida”.
En la “tradición” de los zombis (muertos vivientes), éstos son conocidos por querer vengarse, y regresan a cobrar sus cuentas pendientes. Desde esa vertiente, LaBruce cambia el concepto del zombi y utiliza la pornografía para darles un rol distinto, en que el zombi –que en la cultura pop buscaría dar la muerte–, a través del contacto sexual y el poder de su semen, regresa a las víctimas a la vida. Esta práctica deja como “reflexión” que lo esencial del semen humano es su calidad de célula que produce vida “o que también mata”, diría Cortés, por el peligro que representa el intercambio de fluidos sin protección.

Premio al activismo
Mónica Naranjo se llevó la atención con su Premio Maguey activista: “Nunca imaginé que fuera el premio más polémico, ya que incluso robó cámara a todo el festival”, comentó Cortés.
Agregó que la cantante es una figura popular con trayectoria sólida y proyección internacional, que se ha constituido en un ícono de la comunidad gay. “Se lo merece”, aunque genere comentarios en pro y en contra.
Los organizadores buscarán que año con año el premio crezca y se consolide como plataforma que ayude a eliminar la inercia homofóbica que se ha consolidado con los gobiernos de derecha. Además, como señala Pavel Cortés, el rechazo a la comunidad gay pasa por la falta de educación, problema que se puede paliar con manifestaciones artísticas como el cine, y como como lo ha hecho el FICG a través del tiempo y como lo hará a partir de ahora el Premio Maguey.

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