Menos grupos ciudadanos

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La baja calidad de la democracia, la ineficiencia e ineficacia gubernamental y el bajo perfil de la clase política que nos ha gobernando en los últimos años, ha dado como resultado los bajos niveles de asociación ciudadana que existen en el país, refirió el ex diputado local y federal por el Partido de la Revolucionario Institucional, Juan García de Quevedo, al comentar el libro Redes, vínculos y actores, editado por la Universidad de Guadalajara, presentado en el auditorio de la librería José Luis Martínez del Fondo de Cultura Económica.
“La manera en la que la sociedad ha incrementado sus niveles de desconfianza hacia el gobierno, ha frenado la consolidación de la gobernabilidad en nuestro país”.
Según García de Quevedo “Los ciudadanos están constituidos en redes, pero sus niveles de asociación cada vez son más bajos, pues las enquistadas relaciones de dependencia con el estado tradicional mediante el clientelismo y el paternalismo, impiden formas más independientes, éticas y limpias de acción civil asociativa”.
Los gobiernos facilitan apoyos económicos para que ciertas asociaciones ciudadanas lleven a cabo su labor, a cambio del compromiso de acción electoral y de votos. Lo anterior, lejos de incentivar la asociación, merma aún más la confianza de las sociedades en las autoridades.
El investigador del Colegio de la Frontera Norte, Víctor Alejandro Espinoza Valle, analizó los más de 20 artículos del libro, que “hacen crítica al concepto sociológico de red, en el sentido de que no sólo es positivo generar mecanismos de articulación desde la sociedad, sino que el corporativismo lo usa para controlar la sociedad desde lo político”.
Se refirió a datos aportados por la obra, afirmó que la forma de participación ciudadana más creciente es la religiosa, en particular católica y protestante. “Esto es fundamental para entender la calidad de la democracia que hay en el país”.
El presentador del libro fue el presidente estatal del Partido Acción Nacional, Eduardo Rosales Castellanos, quien coincidió en que existe una relación causal entre desconfianza ciudadana y nivel de religiosidad: entre menos hay entre individuos, más en las instituciones. Dijo que ante la debilidad del Estado, los ciudadanos se están agrupando para resolver sus propios problemas, que los gobiernos y la clase política son incapaces de solucionar, pero éstos pueden ser contrarios a los intereses generales de la sociedad.
El Rector general de la UdeG, Marco Antonio Cortés Guardado, compilador de este libro (junto con Margarita Camarena), mencionó que el objetivo es ejemplificar el enfoque de redes en ámbitos de la realidad social cotidiana desde una perspectiva multidisciplinaria.

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