El arte del desplazamiento, mejor conocido como parkour, llegó a la Universidad de Guadalajara, luego de que hace un mes fuera creado un grupo en disciplina o filosofía, que consiste en desplazarse de un punto a otro lo más fluidamente posible, con base en las habilidades del cuerpo humano.
Esto significa superar obstáculos que se presenten en el recorrido, tales como vallas, muros, paredes, en ambientes urbanos e incluso árboles, y formaciones rocosas, ríos, en ambientes rurales.
Carlos Haro Herrera, iniciador de este proyecto, explica que el parkour significa moverse utilizando tu cuerpo y la inteligencia para superar obstáculos.
“Cuando no había ciudades o asfalto, la gente tenía que moverse a través de árboles, rocas. Conforme vamos evolucionado se nos limita en el movimiento: tenemos autos, nos volvemos sedentarios y la gente usa cada vez menos su cuerpo, mientras que el parkour lo que busca es dar más motricidad y posibilidades de moverse en el entono”.
Señala que esta disciplina surgió en Francia, a finales de los 80 y principios de los 90, porque Raymond Belle, militar, entrenaba a su hijo bajo este sistema.
“Los militares y soldados entrenan con la técnica denominada ‘los caminos del combatiente’, con obstáculos. En base a su entrenamiento y experiencia, inicia a su hijo David Belle, quien hace un grupo y empiezan a practicar esto como un juego”.
Dentro de los beneficios de la práctica de está disciplina, destacan varios, entre éstos el psicológico, ya que optimiza el cuerpo y demuestra que todos somos capaces de hacer cosas que no creíamos posibles. “Como estamos muy limitados en motricidad, aquí explotas ese potencial. Te da seguridad en ti mismo y disciplina, tienes las ventajas de cualquier arte marcial, pero sin pelear. Aquí vas contra ti mismo para superar obstáculos, aquí nadie compite, todo es parejo”.
El beneficio físico es otra de sus ventajas, porque es una actividad demandante, que exige un entrenamiento similar al de un deportista de alto rendimiento, con la finalidad de que los músculos sean como una armadura, además de que al igual que el yoga, te da paz interior. “Para practicarlo es importante estar sano, ya que no es solo llegar y hacer brincos impresionantes. Cualquier persona puede entrenar, pero es muy importante el estado de salud”.
Haro Herrera, estudiante de la licenciatura de cultura física y deportes, de esta casa de estudios, explicó que el proyecto de integrar este grupo surge porque desde hace dos años tiene la inquietud de impulsar una práctica como esta. “Necesitaba hacer algo al respecto. Ya tenía dos años de estar en la carrera sin hacer nada, mientras esto crece rápidamente en México. Cada vez hay más grupos, cada vez la gente lo conoce más y comienzan a hacerse algunas competencias, de las cuales en lo personal no estoy a favor de ellas, porque esto no es competitivo y empieza a convertirse en un deporte”.
Puntualizó que su meta es institucionalizarlo, que la UdeG lo conozca, se interese y en un futuro realizar conferencias con especialistas del extranjero o eventos. “No importa si no sigo en el proyecto. Lo importante es poner la semilla para que esto crezca”.
El grupo de parkour está abierto, lo mismo en la comunidad universitaria, como para el público en general. Su práctica es totalmente gratuita, con solo cumplir con algunos requisitos.
Los entrenamientos son lunes, miércoles y viernes, de 11:00 a 13:00 horas, en el segundo piso del gimnasio de usos múltiples, ubicado en avenida Revolución 1500, en el núcleo Tecnológico.
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La particularidad de esta disciplina radica en su sencillez. Tan sólo es necesario un calzado deportivo cómodo, preferiblemente que tenga buen agarre y adecuada amortiguación. Esto es importante, por el gran número de impactos que recibe todo el cuerpo durante la recepción de los saltos. En cuanto a la ropa, no se requiere nada específico, simplemente ha de ser cómoda, que permita movilidad para efectuar sin trabas cada movimiento.
El objetivo del parkour es el movimiento libre y fluido. No existe ninguna regla: simplemente un espíritu de autosuperación. Su lema es: “ser y durar”. Esto significa que el practicante no tiene que ponerse en peligro e ir superándose cada día, y no debe competir ni intentar superar a los otros. También debe confiar en sí mismo y no tener miedo, con la premisa de no ponerse en peligro.
Los practicantes del parkour son denominados traceurs (traceuses, en el caso de las mujeres). A nivel de entrenamiento, la condición física es vital para poder desarrollar y crecer en la disciplina deportiva. Es necesario un correcto acondicionamiento para proteger y preparar el cuerpo para los saltos y recepciones de todo tipo de movimientos. De esta forma, también se pueden prevenir lesiones de cualquier tipo, para no interrumpir sus prácticas.
