El proceso de desaceleración económica, la inflación más alta de las últimas dos décadas que genera la pérdida del poder adquisitivo y el incremento en tasas de interés, harán que la “cuesta de enero” se extienda hasta el mes de marzo, coincidieron en señalar en rueda de prensa especialistas del Centro Universitario de Ciencias Económico Administrativas (CUCEA), de la Universidad de Guadalajara (UdeG).

Antonio Ruiz Porras, profesor investigador de dicho centro, dijo que estamos en un proceso de desaceleración económica, y si analizamos la tasa de crecimiento del PIB de 2020 a la fecha ha habido un decrecimiento sensible, y se espera una tasa de crecimiento de alrededor de 1.2 por ciento.

“Además de este contexto de desaceleración económica, tenemos la inflación más alta de los últimos 22 años; cerramos con una inflación de 7.82 por ciento, que significa que tenemos la pérdida de poder adquisitivo más grande registrada en las últimas dos décadas”, expresó.

Destacó la falta de margen de maniobra de la política monetaria, «porque lo que estamos viendo es que tenemos tasas de interés muy altas, las tasas de referencia se están incrementando y no se espera que bajen en el corto plazo; esto significa que habrá problemas con las decisiones de crédito y ahorro, por lo que estamos viviendo un panorama complicado en la economía mexicana».

“No podemos descartar que surjan problemas sanitarios asociados con el COVID, todo esto nos hace ver que tenemos un año complicado. Es posible que se mantengan altas las tasas de interés, con sus consiguientes efectos sobre la inversión y el ahorro. Y podemos esperar que la inflación siga creciendo, aunque menos que la del año pasado; como estamos en un proceso de desaceleración, no esperaríamos un alto crecimiento del empleo”, dijo.

En el caso de Jalisco, Ruiz Porras explicó que se espera una mejor situación para la economía jalisciense que para la del resto del país, ya que en materia de empleo y producción se encuentra un poco más arriba de la media nacional.

Héctor Iván del Toro Ríos, profesor investigador del CUCEA, expresó que tras la difícil situación económica que se vive en el contexto internacional a causa de la guerra entre Rusia y Ucrania, así como la desestabilización que algunas naciones aun padecen a causa de la pandemia, el panorama en 2023 no es nada alentador.

“Aunque hablamos de uno de los incrementos salariales más importantes en las últimas décadas y de la aparición del súper peso, que ha ocasionado que el dólar se encuentre ya por abajo de los 19 pesos, no se puede, por el momento, hablar de un triunfo en materia económica, pues la tendencia de los precios siguen en situación alarmante para las personas y los trabajadores, y en el corto plazo se pudiera hablar de un efecto rebote para la paridad peso-dólar, agravando más la situación de los mexicanos”, declaró.

Dijo que en el contexto actual el alza de los precios en México es evidente. Día con día los consumidores, en especial los que perciben el salario mínimo, son los más afectados; muchas familias tienen que recortar sus gastos y sustituir ciertos productos por otros, buscando no afectar el poder comprar otra clase de bienes necesarios.

“El salario mínimo, aún a expensas de los incrementos que se han aprobado, sigue siendo insuficiente, dado que queda obsoleto porque no permite cubrir siete de los ocho grupos que componen la canasta básica mexicana. El costo de la canasta básica sigue al alza, y crece de forma exponencial, mientras que el salario mínimo incrementa en porcentajes que diluyen el incremento del salario”, subrayó.

El especialista añadió que el costo total de la canasta básica para el mes de enero es de 11 mil 539 pesos, donde se propone un salario recomendado de 6 mil 646 pesos mensuales, lo equivalente a 221 pesos diarios, con la finalidad de afrontar la pérdida del poder adquisitivo y la presencia de la inflación.

Recomendaciones

Diana Lizette Becerra Peña, directora de la Plataforma de Economía de Jalisco del CUCEA, hizo una serie de recomendaciones para sobrellevar la “cuesta de enero”, como son: analizar los gastos del día a día, identificar los gastos fijos e indispensables, y eliminar los gastos innecesarios.

“Presupuestar ingresos y gastos de todo el año; ahorrar; cambiar a bienes y servicios más accesibles, consumir productos locales, usar responsablemente las tarjetas de crédito, liquidar deudas y evitar deudas nuevas”, enumeró.

Informó que en la plataforma https://economiajalisco.cucea.udg.mx/ el próximo lunes compartirán un tablero de expectativas económicas para Jalisco, donde además se incluyen recomendaciones y se puede consultar una calculadora que da los estimados de cuáles son los precios de los productos de la canasta básica y el gasto promedio que se puede generar.

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